Parte de la ayuda humanitaria que debía entrar a Venezuela regresó a Colombia después de varios enfrentamientos en la frontera que dejó un saldo de 4 muertos y 285 heridos.
A pesar de que algunos camiones lograron pasar, dos vehículos fueron atacados e incendiados por militares del régimen de Maduro lo que llevó a las autoridades colombianas a tomar precauciones reportó el diario La Vanguardia.
Tres camiones lograron entrar por Ureña pero dos de ellos fueron incinerados por los represores venezolanos.
Durante la jornada, estallaron fuertes disturbios en las fronteras de Venezuela con Colombia y Brasil, cuyo cierre fue dispuesto por el gobierno de Maduro.
El senador cubanoamericano Marco Rubio condenó lo sucedido en la frontera de Venezuela.
«Hoy el régimen de Maduro mató a ciudadanos desarmados de su propio país para evitar que ingresaran alimentos y medicinas» dijo Marco Rubio.
