Jóvenes cubanos que protestaron el 11 de julio de 2021, y llegaron en balsa a Miami, ahora temen ser deportados a la Isla, y que el régimen tome represalias con ellos, informó Telemundo 51.
Los migrantes son hermanos, y salieron a las calles a manifestarse el 11J en Camagüey, sin embargo tras ver que nada cambió y la represión se recrudeció, decidieron tomar el riesgo de embarcarse en una peligrosa travesía.
Desde diciembre llegaron Reinaldo y su hermano al sur de la Florida, en una entrevista con el canal hispano ambos contaron que crearon un grupo de WhatsApp para salir a protestar en su ciudad, luego de enterarse de que habían estallado manifestaciones en todo el país.
Ellos entre un grupo de alrededor de 15 jóvenes marcharon hasta llegar a la Plaza Ignacio Agramonte, una vez allí la Seguridad del Estado los agredió física y verbalmente.
«Nos fueron para arriba y nos cayeron a golpe, las costillas me las partieron», confesó Reinaldo.
«Trabajadores del INDER, de Salud Pública y de Cultura salieron con palos, con tubos a darle golpes al pueblo, mandados por el dictador (Miguel Díaz-Canel)», añadió su hermano.
Los camagüeyanos estuvieron cinco días en un calabozo, luego cumplieron siete meses de prisión domiciliaria a la espera de un juicio.
Ambos confirman que «esos siete meses» presos en su casa fueron «terribles».
Tras tres meses en el sur de la Florida deciden contar su historia, pero temen a la deportación, y a lo que el régimen puede hacerle a su familia en la Mayor de las Antillas.
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