Havana Consulting Group “gurú de las remesas a Cuba” dice que la gestión estatal es una de las causas del estancamiento de la Zona Especial de Desarrollo del Mariel que vaticinaba convertir a la Isla en el Hong Kong caribeño.
No obstante, luego de cuatro años y una inversión brasileña de más de 1.000 millones de dólares, el megaproyecto languidece esperando inversionistas.
“La idea de hacer una zona especial en el Puerto de Mariel es buena. El problema ha estado en la gestión. Ningún país de América Latina ha tenido en dos años la cantidad de empresarios, presidentes y delegaciones que han visitado Cuba, pero no lo supieron aprovechar”, comentó Emilio Morales, director de Havana Consulting Group a El Nuevo Herald.
Morales fue jefe del Departamento de Planificación de Marketing Estratégico en la estatal Corporación CIMEX y abordó varios puntos, como las causas del pobre rendimiento de la zona industrial cubana, que anunciaba el crecimiento de la economía isleña.
El directivo habló de “una burocracia excesiva, un complicado proceso de toma de decisiones que demora el seguimiento de las ofertas de inversión de las empresas extranjeras y retrasos en la finalización de la infraestructura”.
Los 4.888 puestos de trabajo creados, a Morales le resultan pocos, y el consultor afirma que esa reducida cantidad de empleos han sido el indicador más evidente del fracaso de Mariel, “frente a los más de 570.000 que nacieron tras la apertura a la pequeña empresa privada”, añadió.
“No puede ser posible que creen una zona económica especial en Mariel y dejen fuera a los mismos cubanos, sin posibilidades para invertir en ella.
Primero deberían ser privilegiados los empresarios nacionales y luego los extranjeros”, detalló.
“Mariel tenía varias perspectivas: primero procesar el petróleo de la zona norte de Cuba, crear parques industriales con facilidades de importación y repatriación de capitales. Por otra parte, la posición geográfica de Cuba la sitúa en el centro de rutas importantes, lo que podría facilitar el establecimiento de una zona de libre comercio”, acotó el consultor.
Las obras de la Zona Especial de Desarrollo del Mariel estuvieron financiadas por Brasil, con el Partido de los Trabajadores al frente de ese país suramericano, aliado político y económico de Cuba en ese entonces.
El multimillonario contrato estuvo a cargo de Odebrecht, constructora que ha estado involucrada en negociaciones con muchos gobiernos corruptos en América Latina.
Hasta el momento en la Mayor de las Antillas no se ha abierto ninguna investigación relacionada con el conglomerado brasileño.
(Con información de Diario de Cuba)
