Se ha presentado una acusación en la corte a Nicholas Borgesano Jr, dueño de seis farmacias, cinco de las cuales se encuentran en el sur de la Florida, dichas farmacias están vinculadas a una gran estafa al Medicare (programa médico para militares), que involucra a varios seguros privados de salud, y se estima en aproximadamente cien millones de dólares.
Supuestamente, Borgesano Jr usaba estos comercios para presentar a los diversos programas de salud reclamos de reembolsos falsos de medicamentos prescritos.
¿Cómo procedía? El dueño y seis cómplices presentaban a los programas de salud recetas de medicamentos compuestos (como cremas para el dolor y cremas para cicatrices) y datos de pacientes que eran falsos o fraudulentos.
Ellos sobornaban a varias personas, incluyendo un médico certificado que signaba las recetas, y obtenían información.
Ni el médico fue identificado, y tampoco otros detalles fueron ofrecidos.
Desde octubre del 2012 a diciembre del 2015 se mantuvo la estafa en los establecimientos A to Z Pharmacy en New Port Richey (a 25 millas al norte de Tampa), Havana Pharmacy, Medplus/New Life y Metropolitan Pharmacy en Miami, y Jaimy Pharmacy y Prestige Pharmacy, en Hialeah.
La acusación formal señala: “En total, estas farmacias fueron usadas para solicitar la entrega de aproximadamente $633,943,82 en reclamos de recetas de medicamentos compuestos y recibieron aproximadamente $157,428,599 en pagos de reembolso».
El hombre de 45 años, dueño de los comercios, se declaró culpable a principios de este mes por conspiración para cometer un fraude contra planes de salud y admitió que él y sus cómplices manipularon los códigos de factura en los reclamos y también hicieron peticiones por ingredientes farmacéuticos que ellos no tenían en sus inventarios.
(Con información de El Nuevo Herald)