Migrantes cubanos con I-220A se unieron en protesta afuera de una oficina del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) en Miramar, Florida, pidiendo se les permita acceder a un estatus migratorio permanente en EEUU, informó Telemundo 51.
Luego de que en las últimas semanas la esperanza se había despertado en muchos isleños con este formulario, por una nueva ley que había generado grandes expectativas, muchos continúan en un limbo migratorio que no parece tener arreglo a corto plazo.
Según el abogado de inmigración Jose Guerrero, dicha ley que había entusiasmado a los miles de cubanos que se encuentran en esta situación, no implica que quienes tengan la forma I-220A puedan obtener un parole de forma automática. La misma sólo facilitará que en algunos casos se realice una revisión interna para determinar si cuando las autoridades los liberaron debieron concederle un parole.
Bryan Pérez médico internista emigró de Cuba a Islas Caimán, luego pasó a Nicaragua, y de ahí vivió una larga travesía hasta llegar a Estados Unidos, y las autoridades le entregaron el formulario I-220A.
Dicha orden de libertad bajo palabra no permite a los cubanos acogerse a la Ley de Ajuste Cubano, puesto que no se considera que los migrantes que tienen el I-220A hayan entrado a territorio estadounidense de manera legal.
Por su parte, la exiliada cubana Dayana Pérez cuenta que salió del país comunista hace más de un año y atravesó Centroamérica con sus hijos pequeños y fue procesada por las autoridades norteamericanas en el área fronteriza que colinda con Tijuana, México.
Dayana como la gran mayoría de los cubanos en su misma situación esperan con ansias se les permita obtener una residencia legal en EEUU, sin embargo esta posibilidad parece cada vez más lejana.
«No es una ley que signifique que a todos los I-220A le van a dar parole», especificó Guerrero, especialista en derecho migratorio.
Yuniel Escabera, otro migrante procedente de la Mayor de las Antillas, explica que deberían tener las mismas oportunidades que han tenido históricamente sus compatriotas en EEUU, ya que todos se han visto obligados a emigrar por una cruenta tiranía en Cuba.
Al día de hoy, unos 400 mil migrantes con I-220A continúan sin estatus migratorio en Estados Unidos, no obstante de manera discrecional muchos han recibido en sus correos un cambio de estatus a parole humanitario, lo cual les ha permitido aplicar para la residencia permanente en tierra de libertad.
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