La cifra de decesos por Covid-19 en Estados Unidos superó el pasado miércoles los 60.000, un número que en las últimas semanas se pensaba iba a ser el tope, informa The San Diego Union-Tribune.
Según las estadísticas actualizadas hasta este viernes 1 de mayo, el país tiene 64.203 muertes asociadas al coronavirus, y 1,091,038 de contagios registrados.
Si bien un tratamiento con el antiviral remdesivir ha arrojado esperanza, parece no tendremos paz con la pandemia hasta que no se consiga producir la vacuna contra la enfermedad originada en China.
Las noticias no son para nada alentadoras, según un editorial de The Washington Post, jóvenes con síntomas leves de coronavirus, están muriendo a causa de accidentes cerebrovasculares.
De acuerdo a un médico del Hospital Mount Sinai Beth Israel en Manhattan, el resultado de la tomografía de un hombre de 44 años reveló una obstrucción grande en el lado izquierdo de su cabeza, el paciente acudió al centro hospitalario porque ya empezaba a presentar problemas al hablar y al mover el lado derecho de su cuerpo.
Varios pacientes de entre 30 y 50 años habían llegado con accidentes cerebrovasculares, estando infectados de Covid-19, los médicos no se explican porque «la edad promedio para ese tipo de ACV severo es de 74» años.
El neurólogo intervencionista comenzó el procedimiento de remover el coágulo, y vio algo sin precedentes en su historial como médico, observó a través del monitor donde se aprecia el mapa de los vasos sanguíneos, como se formaban coágulos nuevos a tiempo real alrededor del mismo.
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