El representante Rick Crawford impulsa una legislación que pretende aperturar la agricultura americana a los mercados cubanos con un gravamen del 2% a las ventas, a la vez que pretende ayudar a las víctimas del régimen, asegura un artículo publicado en Arkansas Online.
El dinero recaudado se utilizará para recompensar a los estadounidenses que perdieron propiedades en la isla después del triunfo de la revolución en 1959.
Aunque la actual ley impide que agricultores nativos de EEUU otorguen créditos a los cubanos, y la mayoría de intentos por cambiarla han fracasado, Crawford planea presentar una versión enmendada de su legislación.
El funcionario estima que la cuota del 2%generaría alrededor de 30 millones de dólares al año, cifra que podría alcanzar los 60 millones en un plazo de cinco años.
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