Departamento de Salud de Florida suspende licencia a cubana acusada de tocar inadecuadamente a un menor en una sesión de masajes

Las autoridades del Departamento de Salud de Florida después de una minuciosa investigación decidieron retirar la licencia a una masajista cubana que arrestaron el pasado marzo por tocamientos inapropiados a un menor de 17 años que acudía a una sesión de masajes en Trump National Doral Golf Club, del condado de Miami-Dade.

De acuerdo con los registros judiciales a los que Local 10 tuvo acceso la licencia se revocó el 23 de abril. La mujer que se enfrenta a un cargo de conducta lasciva y obscena se llama Yasmine Ponce Rodríguez de 56 años de edad y reside en el suroeste de Miami-Dade. Según se conoce los hechos sucedieron el 1 de marzo cuando el joven asistió a una sesión en el club del cual formaba parte.

La acusada mientras efectuaba la sesión de masaje retiró la tela que cubría el trasero del menor y tomó la zona genital y la «manipuló manualmente», según refiere la queja que presentó el Departamento de Salud de la Florida.

La persona afectada contó a los oficiales que su respuesta instantánea fue protegerse: trató de desviar sus manos con una acción defensiva, momento en el cual ella detuvo la agresión, indica el informe de detención del Departamento de Policía de Doral. Después continuó cuando la sospechosa le preguntó a la víctima si se encontraba bien.

La víctima afirmó que apenas se comunicaban debido a un obstáculo idiomático; por lo tanto, no hubo diálogo entre ellos tras el suceso. Al finalizar el masaje el joven se comunicó con su pareja y después de analizar el incidente en cuestión decidieron comunicarse con las autoridades.

El informe oficial también subrayó la conexión anterior entre el cliente y la masajista, mencionando que el joven había participado en sesiones anteriores con Ponce Rodríguez. Después de cuatro horas la policía arrestó a Ponce que una vez detenida rechazó ser autora del hecho alegando que no tuvo ningún incidente entre ella y el niño.

La imputada, por otro lado, afirmó en el tribunal que desconocía que la víctima era menor de edad, y alegó que “a los menores no se les pueden realizar masajes sin la supervisión de un familiar”.

Yasmine estuvo bajo custodia en el Centro Turner Guilford Knigth y hace pocas semanas salió en libertad después de abonar una fianza de 2.500 dólares mientras se mantiene el curso de la investigación. El próximo 21 de mayo deberá comparecer ante un tribunal que le está dando seguimiento a su caso.