Una mujer afrocubana fue discriminada junto a sus tres amigos homosexuales, en un bar privado, situado en #209 Aguiar, en La Habana Vieja, denunció en sus redes sociales la organización autónoma Alianza Afro-Cubana.
Según indica la publicación, «casos como estos no son aislados» en La Habana, de acuerdo a la Alianza «con el aumento del sector privado, aumentan también las manifestaciones racistas, xenófobas y otras discriminaciones entre cubanas y cubanos».
A Maité Alboniga y a sus tres amigos se les prohibió entrar al establecimiento, alegando que el volante para ingresar al lugar era falso, un folleto que se distribuye por toda la zona, acotó la organización en su página de Facebook.
«Ella junto con sus amigos observaron como unos escasos minutos, entraron un grupo de personas de nacionalidad mexicana y alemán, donde solamente bastó ser extranjero para poder ingresar al bar», añade el post.
«El racismo y la discriminación racial, la xenofobia, la fobia hacia el colectivo LGBTIQ continúa siendo uno de los problemas más graves de respeto a los derechos humanos. Males que están completamente extendido por nuestras sociedades, cobrando una fuerza incontrolable», concluye la asociación autónoma que pide circular la información en denuncia al bar elitista conocido como El Eleggua.
No es la primera vez que denuncias de este tipo circulan en las redes, recientemente el artista plástico y opositor Luis Manuel Otero Alcántara denunció le impidieron entrar al popular bar Mio y Tuyo, negocio que aparece como «privado» pero es financiado en parte por Raúl Guillermo Rodríguez Castro, el nieto y jefe de seguridad personal de Raúl Castro, conocido como El Cangrejo.
En un país donde aseguran no existen las clases sociales, ocurren manifestaciones de este tipo, donde las personas a menudo son discriminadas por su estatus o posición social, lo que quiere decir que se infiere que no tienen dinero, o la presencia adecuada para ingresar a determinado establecimiento.
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