El pasado martes, un trágico suceso aconteció en el condado de Miami-Dade al resultar muerto un niño de 8 años identificado como Jaisyn Burgos.
La policía del condado determinó, a partir de los resultados arrojados por la autopsia, que el niño había sido estrangulado por su propia madre, nombrada Shaneka Ann McKinzie, de 36 años.
Según las investigaciones practicadas, la mujer efectuó el acto homicida con un mantel mientras su hijo dormía y no se detuvo hasta que este quedó inconsciente.
Posteriormente, lo subió a su vehículo y condujo por varias localidades del condado, arribando finalmente a un hospital en Hialeah, centro en el que fue declarado el fallecimiento del menor.
McKinzie confesó el crimen a las autoridades, manifestando que había planificado durante los dos días anteriores quitarle la vida a su hijo.
En el día de hoy la policía informó que la mujer fue arrestada y enfrenta un cargo de asesinato en primer grado, debiendo comparecer a corte precisamente este jueves.
Actualmente se encuentra recluida en la cárcel Turner Guilford Knight (TGK), ubicada en Miami- Dade.