Dos cubanos fueron condenados a cadena perpetua y otros entre 8 y 25 años por un intento de salida ilegal del país que termino en la muerte de cuatro personas. Jorge Luis Salazar y Reinier Armas fueron sentenciados a privación perpetua de libertad por asesinato en grado de tentativa, robo con violencia o intimidación en las personas y falsificación de carné de identidad según la prensa oficial en Cuba.
El juicio de los responsables del hecho donde murieron cuatro personas en Cuba se celebró en el tribunal provincial de Artemisa -a unos 60 kilómetros al oeste de la capital. Rafael Sánchez fue condenado a 25 años de prisión, Yassel Montero a 22, Michel Luis García a 10, tanto Yusniel Grimont y Jorge Ramón Suárez fueron sentenciados a 8 años de prisión cada uno.
Los acusados habían logrado convencer a 11 personas para salir ilegalmente del país cobrándoles altas sumas de dinero.
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