Inmigrantes indocumentados en EE.UU. viven preocupados ante nuevas medidas

La vida para los inmigrantes sin papeles en Estados Unidos se ha convertido en una pesadilla marcada por el miedo y la zozobra de ser detenidos en cualquier momento tras las órdenes ejecutivas aprobadas por el presidente Donald Trump.


La situación es especialmente angustiosa para aquellos que tienen hijos de los que pueden ser separados si son arrestados y deportados como parte de la nueva política instaurada por la Casa Blanca.

«Tengo miedo de salir a la calle. Me da miedo llevar a mis niños a la escuela. Me sobresalto cada vez que veo una patrulla de la policía», declaró a EFE Amanda, una mexicana que lleva cerca de 15 años viviendo en California y es madre soltera de dos niños de siete y 10 años que son ciudadanos estadounidenses.

Un memorando, firmado el 20 de febrero por el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, precisa que no solo se perseguirá a los inmigrantes indocumentados con cargos penales violentos, sino a aquellos que hayan «abusado» de los beneficios públicos o que, «a juicio de un agente de inmigración, puedan suponer un riesgo para la seguridad pública y seguridad nacional».

Los temores surgidos durante la pasada campaña electoral a partir de la retórica contra los inmigrantes desplegada por Trump se han hecho realidad en forma de imágenes repetidas en los medios, como la de una niña que llora desconsolada después de haber grabado en su teléfono móvil la detención de su padre por agentes de inmigración.

Estas informaciones, junto con otras falsas sobre redadas y operaciones sorpresa de los agentes de inmigración, tienen en vilo a la población indocumentada.


«Yo llegué a ilusionarme (…) y a pensar que iba a poder estar en el país legalmente. Hasta alcancé a preparar mis papeles», señala Amanda, uno de los once millones de inmigrantes sin permiso que existen en el país.

A los clásicos talleres «Conozca sus derechos» algunas organizaciones han sumado otros sobre cómo otorgar la custodia legal de los hijos a otras personas.

Por ejemplo, en Casa San José, un centro de ayuda comunitaria en Pittsburgh, Pensilvania, han lanzado una campaña para que ciudadanos estadounidenses acepten la custodia de hijos de indocumentados en caso de que los padres sean deportados.

Cuando hay dos padres, si a uno lo deportan, el otro podría cuidar de los niños. Sin embargo, en el caso de madres solteras como Amanda, la situación es muy difícil.

Pero el miedo no solo afecta a los que son padres. Rómulo, un mexicano que con un «compadre» tiene un negocio de jardinería en California, teme hacer nuevos clientes.

«¿Cómo sé yo que esa persona que me pide que le arregle el jardín no me va a denunciar a las autoridades si sabe que soy indocumentado?», se pregunta este jardinero de 45 años.


2 Comentarios

  • el zorro marzo 6, 2017

    se sabe que si esta indocumentado esta violando la ley no aquie en culquier pais cual es el problema vamonos pa mexico y a ver si no nos deportan VIVA TRUMP no se puede defender lo indefendible no jodan tanto

  • Smith marzo 6, 2017

    Bueno Amanda deberías estar preocupada ya lo dijo John Kelly arrestaran a los que hayan a abusado de los beneficios y tu madre soltera de dos hijos seguro seguro » abusaste» de los beneficios

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