La Copa Mundial de la FIFA 2026 será la más grande en la historia del torneo: por primera vez participarán 48 selecciones, con un calendario que se extenderá del 11 de junio al 19 de julio y un despliegue de 16 sedes distribuidas entre Estados Unidos, México y Canadá. Este formato ampliado supone más partidos (104 en total) y, en consecuencia, una mayor demanda de boletos, hospedaje y servicios turísticos.
Con este telón de fondo, la FIFA abrió ya la primera fase de venta de entradas, generando gran expectación entre millones de fanáticos en todo el mundo.
La fiebre de las entradas: sorteo y primeras notificaciones
En esta primera etapa, la prioridad fue para quienes participaron en el sorteo realizado meses atrás, en el que se recibieron más de 4,5 millones de solicitudes. A los afortunados le están notificando vía correo electrónico, esta dinámica busca ofrecer un acceso más equitativo, aunque también ha dejado a miles de aficionados en espera de la siguiente fase.
«Estas no solo son cifras extraordinarias, sino también una declaración contundente. «Todo el mundo quiere ser parte de la Copa Mundial de la FIFA 26, el evento más grande, inclusivo y emocionante de la historia. Desde Canadá, México y Estados Unidos, hasta países grandes y pequeños en todos los continentes, los aficionados están demostrando una vez más que la pasión por el fútbol realmente une», dijo Gianni Infantino, presidente de la FIFA. El organismo aclaró que, en etapas posteriores, se abrirán nuevos sorteos, compras por orden de llegada y una plataforma oficial de reventa segura, con el fin de evitar la especulación y reventa ilegal que históricamente ha marcado la obtención de boletos en mundiales anteriores.
Precios: del sueño accesible al lujo exclusivo
Quienes deseen asistir tendrán la oportunidad de elegir entre diferentes zonas del estadio: la Categoría 1, considerada la de mayor calidad por su cercanía a la acción, y la Categoría 4, que se encuentra en los niveles altos, reservada para quienes buscan opciones más económicas.
Los precios arrancan en 60 dólares para partidos de fase de grupos, un costo pensado para ser relativamente accesible al aficionado promedio. Sin embargo, los boletos para la final alcanzan los 6.730 dólares, lo que los convierte en algunos de los más caros en la historia de la Copa del Mundo.
Beneficios adicionales para aficionados y marcas
El mes pasado, American Airlines confirmó que los socios de su programa de fidelidad AAdvantage podrán utilizar sus millas para adquirir boletos del Mundial. La venta iniciará el 13 de octubre para los niveles ejecutivos platino y concierge key, continuará el 14 para los miembros platino pro, platino y oro, y se abrirá al resto de los afiliados el 15 de octubre.
Desde este jueves, ciertos clientes de Verizon podrán acceder a boletos gratuitos para la Copa Mundial, además de recibir otros beneficios exclusivos. «Para mí, hay pocas cosas tan emocionantes como experimentar el fútbol en vivo, ya sea dentro o fuera del campo, y por eso estoy orgulloso de asociarme con Verizon para celebrar sus planes de dar a los aficionados un acceso sin precedentes al torneo», dijo David Beckham que promocionó la compañía.
Estas alianzas muestran cómo el Mundial no solo es un evento deportivo, sino también un escaparate para la industria del turismo, la aviación y las telecomunicaciones.
Una novedad de 2026 será la implementación de precios dinámicos, un sistema similar al de aerolíneas o conciertos que ajusta el valor en tiempo real según la demanda. Esto podría favorecer a quienes compren con antelación, pero también elevar significativamente los precios en partidos de alta expectativa, como clásicos regionales o encuentros de eliminación directa.
Clasificados, sedes y el panorama deportivo
Además de los anfitriones (Estados Unidos, México y Canadá), selecciones históricas ya tienen asegurada su participación: Argentina, Brasil, Uruguay, Colombia, Ecuador, Paraguay, Marruecos, Túnez, Japón, Corea del Sur, Irán, Australia y Nueva Zelanda, entre otras. Aún quedan 30 cupos en disputa, lo que mantiene la incertidumbre sobre posibles ausencias o sorpresas en la competencia.
Las sedes se distribuyen estratégicamente: en Estados Unidos se jugarán partidos en ciudades icónicas como Miami, Nueva York, Los Ángeles y Dallas; México contará con estadios históricos como el Azteca en Ciudad de México; y Canadá tendrá encuentros en Toronto y Vancouver.
Los fanáticos pueden estar tranquilos: no se prevé que las entradas se agoten de inmediato. En total, los 16 estadios que albergarán los 104 partidos ofrecen cerca de 7.1 millones de butacas, aunque aún se desconoce qué proporción se reservará para la venta al público.
Retos logísticos y migratorios
Aunque la emoción es alta, persisten desafíos. El calendario final de partidos se conocerá en diciembre, por lo que muchos fanáticos todavía no saben en qué ciudad jugarán sus selecciones favoritas.
Además, los expertos advierten sobre un posible encarecimiento de hospedajes y transporte en las ciudades sede, fenómeno que ya se vivió en los mundiales de Brasil 2014 y Catar 2022, donde los precios hoteleros se dispararon hasta un 300%.
Otro factor es el acceso migratorio a Estados Unidos, que se ha vuelto más restrictivo en los últimos años. La necesidad de visados, sumada a políticas fronterizas más severas, podría complicar la llegada de miles de aficionados, sobre todo de países latinoamericanos y africanos.
El panorama se complica aún más con las declaraciones de Donald Trump. El mandatario, que mantiene vínculos estrechos con Infantino, sugirió que podría impulsarse un cambio en las ciudades anfitrionas si considera que algunos lugares no ofrecen la seguridad necesaria.
«Si alguna ciudad creemos que va a ser incluso un poco peligrosa para la Copa Mundial… no permitiremos que vaya allí. Lo moveremos un poco. Pero espero que eso no suceda», advirtió Trump la semana anterior.
El Departamento de Estado subrayó que la seguridad de Estados Unidos, así como la de los partidos del Mundial, los atletas, los aficionados y las sedes, constituye su máxima prioridad en el marco del torneo. Además, instó a los viajeros que requieran visa a iniciar el trámite cuanto antes y aseguró que trabaja para garantizar un proceso ágil, transparente y eficiente.
El proceso de venta no concluirá con la primera ventana. Del 27 al 31 de octubre se pondrá en marcha un sorteo anticipado que permitirá a los aficionados elegidos comprar boletos entre noviembre y diciembre. La tercera oportunidad llegará después del 5 de diciembre, fecha en la que se celebrará el sorteo de equipos; entonces comenzará el sorteo de selección aleatoria que marcará el cierre de la fase inicial de ventas.
Impacto económico y cultural
El Mundial 2026 no solo será un espectáculo deportivo: se proyecta que generará más de 11.000 millones de dólares en ingresos para Norteamérica, beneficiando a aerolíneas, cadenas hoteleras, restaurantes, transporte terrestre y plataformas digitales de servicios.
En el plano cultural, este evento representa la consolidación del fútbol en un mercado clave como el estadounidense, donde el deporte ha crecido notablemente en popularidad gracias a ligas como la MLS y a figuras internacionales que han migrado a clubes norteamericanos, como Lionel Messi en el Inter Miami.
La cuenta regresiva hacia julio de 2026
La venta de entradas marca el comienzo oficial de la fiebre mundialista. Con millones de fanáticos pendientes, un formato histórico y desafíos logísticos por resolver, el Mundial 2026 promete ser no solo el más grande, sino también uno de los más complejos y espectaculares en la historia del fútbol.
La expectativa es clara: estadios llenos, audiencias récord y un evento que definirá el rumbo del fútbol en Norteamérica para las próximas décadas.