Alec Baldwin se encuentra destinado a ir a juicio mientras enfrenta las consecuencias de la trágica muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins, quien falleció en 2021 debido a un disparo inesperado de munición real de un arma de utilería en el set de la película Rust.
El viernes, tras la presentación de pruebas por parte de los fiscales especiales Kari Morrissey y Jason Lewis, un gran jurado en Nuevo México tomó la decisión de acusar formalmente a Baldwin. Los cargos que se le imputan incluyen un solo cargo de homicidio involuntario.
«Esperamos con ansias nuestro día en la corte», dijeron los abogados de Baldwin, Luke Nikas y Alex Spiro, de Quinn Emanuel.
La posible sentencia de Baldwin, si es declarado culpable, podría implicar una pena de prisión de hasta 18 meses. La programación del juicio sigue sin revelarse.
Durante el mes de noviembre, una colección de videos, publicados por NBC News, reveló detalles de la participación de Alec Baldwin en el incidente. Estas grabaciones exclusivas capturaron el manejo de Baldwin de una pistola de utilería, junto con sus interacciones con los miembros del equipo durante la filmación de la escena. El metraje constaba de cinco vídeos distintos, con un total de aproximadamente siete minutos. En estas grabaciones, se podía ver a Baldwin preparándose para las escenas, descargando las armas de fuego y encarnando la personalidad de su personaje. En particular, en dos de los videos, incluso tomó medidas para reorganizar a los miembros de la tripulación luego de expresar preocupaciones sobre su seguridad.
La producción se detuvo después de quince días de rodaje por parte del equipo.
En un giro de la trama, Baldwin se enfrenta a cargos una vez más cuando el gran jurado emite una acusación. Esta medida sigue a una decisión anterior de los fiscales de Nuevo México de retirar los cargos de homicidio involuntario en su contra en abril.
Baldwin insiste firmemente durante entrevistas con ABC News y CNN en que es inocente de disparar el arma, afirmando que el subdirector Dave Halls había confirmado que el arma de fuego estaba descargada antes del incidente. Halls enfrentó consecuencias legales en marzo, al no impugnar un delito menor de manejo imprudente de un arma peligrosa, lo que resultó en una sentencia de prueba sin supervisión de seis meses.
