
El lugar a definirse el combate esta aún por determinarse pero serán ambos buenos para el boxeador cubano, Miami por un lado, que es la capital afectiva de Lara; y Houston por otro, donde ha echado raíces, vive y entrena.
«Queríamos otros grandes nombres para Lara, un Cotto, un Daniel Jacobs, pero no ha sido posible», expresó De Cubas Jr. al Herald. «Cuando apareció Vanes, él me dijo que no había olvidado lo sucedido, que quería ponerle punto final a la controversia».
«A Lara nadie le puede acusar de haber rechazado a un rival», recalcó el manager. «Con Vanes tenemos un capítulo pendiente y lo vamos a cerrar antes de mirar hacia delante. Vamos a ver quién tiene el valor de ser el próximo».
El cubano es el actual campeón lineal de la Asociación Mundial de Boxeo y pretende subir dos veces más al ring este 2016 y con oponentes que estén entre los 10 mejores de la división.






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