
En las últimas semanas, múltiples cubanos en Estados Unidos han reportado la negación de sus solicitudes de residencia permanente bajo la Ley de Ajuste Cubano (LAC), un beneficio migratorio históricamente considerado estable y predecible. La situación ha generado preocupación generalizada, ya que muchos solicitantes afirman cumplir con los requisitos tradicionales de la ley: haber residido al menos un año físico en el país y ser ciudadanos cubanos sin antecedentes que los inhabiliten.
Los rechazos, según testimonios recopilados por plataformas de noticias y abogados especializados, se han vuelto más frecuentes desde mediados de noviembre, lo que sugiere un cambio en la interpretación administrativa de ciertos criterios legales.
El punto crítico: la interpretación de la Sección 245 de la Ley de Inmigración
La raíz de la controversia radica en la Sección 245 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), que establece que para ajustar estatus, la persona debe haber sido “inspeccionada” al ingresar al territorio estadounidense. Esta exigencia, que por décadas fue interpretada de manera más flexible para los cubanos, ahora estaría siendo aplicada con criterios más estrictos.
Muchos de los solicitantes afectados son migrantes que ingresaron de forma irregular por la frontera, que fueron liberados con órdenes de supervisión, con documentos provisionales o con parole emitido en circunstancias humanitarias. Según la nueva interpretación aplicada por algunos oficiales, estos documentos no cumplirían suficientemente con la exigencia de “inspección formal”.
Un cambio que contradice décadas de práctica administrativa
Para abogados como Mayron Gallardo, esta postura no solo es nueva, sino que contradice la forma en que la LAC se aplica durante más de medio siglo. Recordó que desde la década de 1960, el gobierno federal reconoció la situación excepcional del éxodo cubano, permitiendo que migrantes sin inspección formal pudiesen ajustar estatus tras un año de presencia en el país.
Gallardo subrayó que la intención del Congreso al aprobar la Ley de Ajuste Cubano en 1966 fue claramente humanitaria: ofrecer un camino seguro hacia la residencia a quienes huían del régimen cubano, independientemente de su forma de entrada.
El debate sobre quién tiene autoridad para otorgar el parole
Uno de los elementos más llamativos de las denegaciones recientes es la duda que algunos oficiales han planteado sobre la autoridad de agencias como ICE, CBP o USCIS para otorgar el parole, un permiso empleado durante años como herramienta legal para permitir el ajuste de estatus de cubanos.
Gallardo recordó que la autoridad para conceder parole está delegada por ley al fiscal general y, por extensión, a las agencias que administran los procesos migratorios. Por lo tanto, considera incorrecto afirmar que ciertos paroles emitidos a cubanos carecen de validez para propósitos de ajuste.
Señalamientos de inadmisibilidad bajo la Sección 212
Otra razón citada en algunas negaciones está relacionada con la Sección 212 de la INA, que establece causales de inadmisibilidad. Oficiales han argumentado que quienes entraron sin inspección podrían considerarse inadmisibles, afectando automáticamente su elegibilidad para ajustar estatus.
Sin embargo, memorandos internos del antiguo INS, incluido uno de 1999 que sigue siendo referencia, establecen que los cubanos pueden acogerse a excepciones humanitarias precisamente por su situación política. Esos lineamientos se utilizaron por décadas como base para aprobar miles de casos.
La regla de “carga pública” no debería afectar a los solicitantes cubanos
Pese a que en otros procesos migratorios la regla de “carga pública” puede ser un factor, abogados resaltan que esta política no se encuentra plenamente implementada para los cubanos que aplican bajo la LAC. Esto significa que recibir ciertos beneficios públicos no debería, por el momento, ser motivo de negación del ajuste.
Impacto emocional y económico en los solicitantes
Las negaciones han generado fuerte angustia en solicitantes que, tras un año de residencia, esperaban consolidar su estatus legal. Muchos han invertido dinero en honorarios legales, licencias laborales, mudanzas, trámites y cursos profesionales, bajo la expectativa de obtener la residencia.
Además, quienes reciben una negación enfrentan la posibilidad de quedar en un limbo migratorio, lo que impacta su estabilidad laboral, su acceso a servicios y su capacidad para viajar o reunirse con familiares.
¿Qué opciones tienen quienes reciben una negación?
Los expertos recalcan que una decisión negativa puede apelarse o solicitarse su reconsideración. Si el solicitante demuestra que la interpretación de la ley aplicada en su caso contradice precedentes o políticas establecidas, existe la posibilidad de revertir la decisión.
Abogados como Gallardo recomiendan revisar cuidadosamente la notificación de negación, reunir documentación adicional que evidencie la validez del parole o la naturaleza humanitaria del caso, y presentar una moción fundamentada.
Un contexto histórico que contrasta con la situación actual
Durante los últimos 58 años, la Ley de Ajuste Cubano ha sido una de las herramientas más estables y excepcionales dentro del sistema migratorio estadounidense. Incluso en momentos de tensiones políticas o recortes administrativos, la LAC continuó aplicado de manera consistente.
El incremento reciente de negaciones representa un giro que podría marcar un precedente para miles de cubanos que han llegado al país en los últimos años, especialmente quienes ingresaron por la frontera.
Incertidumbre para el futuro de la LAC
Aunque no hay anuncios oficiales de cambios normativos, el aumento de negaciones alimenta la percepción de que la LAC podría estar enfrentando su etapa más complicada en décadas. La comunidad cubana, ampliamente dependiente de este beneficio, permanece a la espera de aclaraciones de USCIS o posibles litigios que obliguen a restablecer la interpretación tradicional de la ley.
Por ahora, los abogados recomiendan mantener la calma, documentar cada paso del proceso migratorio y prepararse para posibles apelaciones si la solicitud es rechazada.




