Tragedia en Florida: dos hombres de Miami y sus perros mueren por un rayo en Highlands County

El condado de Highlands, en el centro de Florida, fue escenario de una tragedia que conmociona a la comunidad miamense. Dos hombres, de 38 y 31 años, perdieron la vida junto a sus dos perros, presuntamente tras ser alcanzados por un rayo mientras se encontraban cerca del canal C-41A. Agentes de la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC por sus siglas en inglés) hallaron sus cuerpos sobre un terraplén, con el vehículo en el que viajaban estacionado muy cerca del lugar.

La Oficina del Sheriff del Condado de Highlands dijeron que sospechan que el incidente ocurrió el lunes por la tarde, aunque la Oficina del Médico Forense del Distrito 10 será la encargada de determinar la causa exacta y la hora de las muertes. La hipótesis inicial apunta a un impacto de rayo, un fenómeno que, aunque frecuente en Florida, rara vez deja un saldo tan devastador en un solo episodio.

Florida, la “capital de los rayos” en EE.UU.

Florida es el estado con mayor incidencia de rayos en todo el país, con un promedio de 1,2 millones de descargas eléctricas cada año, según datos del Servicio Meteorológico Nacional. La combinación de altas temperaturas, humedad y tormentas convectivas hace que regiones como el condado de Highlands sean especialmente propensas a este tipo de fenómenos.

En lo que va de 2025, varios condados de Florida han reportado incidentes vinculados a rayos, con al menos media docena de muertes registradas a nivel estatal. El suceso de Highlands County se suma a una larga lista de casos que refuerzan la advertencia de que ninguna tormenta debe subestimarse.

Mensaje de prevención de las autoridades

El sheriff Paul Blackman advirtió a los residentes sobre la importancia de resguardarse de inmediato al escuchar truenos. «Si puedes escuchar truenos, eso significa que los rayos están lo suficientemente cerca como para caer, incluso si el cielo aún no se ve tan mal. Es esencial prestar atención y planificar con anticipación cuando se acerquen las tormentas», explicó Blackman.

Las recomendaciones incluyen:

• Buscar refugio en construcciones seguras o vehículos con techo duro.
• Evitar permanecer en campos abiertos, debajo de árboles aislados o cerca de cuerpos de agua.
• Mantenerse alejados de ventanas durante la tormenta.
• No usar aparatos eléctricos conectados por cables hasta que pase el peligro.

La dimensión humana de la tragedia

Aunque no se han revelado las identidades de las víctimas, se sabe que ambas eran residentes de Miami. Su muerte, junto con la de sus mascotas, resuena de manera particular en una comunidad que reconoce a los perros como parte de la familia. Vecinos y allegados expresaron su consternación en redes sociales, resaltando lo inesperado y repentino de este tipo de fenómenos.

El hecho de que el accidente ocurriera en una zona rural a 160 millas de Miami resalta también la vulnerabilidad de quienes visitan áreas naturales o realizan actividades al aire libre en medio de tormentas, donde el acceso a refugios seguros suele ser limitado.

La tragedia en Highlands County no solo enluta a dos familias de Miami, sino que también funciona como un recordatorio doloroso de la necesidad de respetar las alertas meteorológicas en un estado donde los rayos forman parte de la vida cotidiana. Las autoridades insisten en que la prevención y la educación ciudadana son clave para reducir riesgos y salvar vidas.

Florida: la capital nacional de los rayos

El caso se enmarca en un contexto preocupante. Florida es considerado el estado con mayor incidencia de rayos en Estados Unidos. En 2024 se reportaron 5 muertes por impacto de rayo en el estado, casi la mitad del total nacional (12). Entre ellas, tres ocurrieron en el sur de Florida, en localidades como Naples, Pembroke Pines y Davie.

Según un informe de la empresa AEM, Florida registró en promedio 76 rayos por milla cuadrada el pasado año, lo que lo ratifica como la “capital de los rayos” del país. En la última década (2015-2024), el estado acumuló alrededor de 50 fatalidades por descargas eléctricas, con un promedio anual cercano a 7 víctimas.