Daniela Pérez Clavelo, una joven de apenas 20 años, originaria de Ciego de Ávila que hace arte a través del maquillaje ha dedicado una de sus más recientes obras al éxodo cubano, usando como telón su propio rostro y cuerpo.
Impresionante el talento de esta avileña, licenciada en Nutrición según nos contó cuando nos interesamos en su trabajo artístico, con el cual se inició hace apenas dos años, y con mayor empeño hace solo doce meses.
Una bandera cubana pintada al detalle sobre su ojo izquierdo con las palabras familia y amigos en la parte superior, barrio, hogar, recuerdos en su mejilla, un avión a la extrema derecha de su rostro, y las rutas dibujadas con líneas blancas intermedias atravesando su nariz y mentón.
Para su pecho eligió el color turquesa que nos devuelve sin duda las memorias de ese paraíso tropical que es Cuba, en cuestión de paisajes y de belleza natural. Una pareja que se despide al fundirse en un abrazo, otra aeronave de fondo, un pasaporte más abajo. Del otro lado el continente americano, Miami casi sobre su hombro y la figura de la Isla en el medio.
«Creo que no existe dolor más grande en el mundo que despedirse de la tierra que te vio nacer. Los cubanos somos empujados a recorrer largos caminos por un futuro, un mejor trabajo, una mejor alimentación, un mejor salario, un mejor transporte, en fin una vida digna. En ocasiones no lo hacen por ellos, sino por la persona que quedó atrás, una madre, un padre, una pareja, o en la mayoría de los casos un hijo, al que cruzarías mar y tierra solo por hacerlo feliz», escribió en sus redes junto a fotos de su creación.
Para Daniela «el cubano es un luchador y un soñador» que «no le teme a los miles de kilómetros que se interponen entre su pasado de agonía y su futuro incierto».
«Este maquillaje, va dedicado a todas esas personas que han recorrido el mundo para lograr sus sueños, llevando en la mochila la esperanza y las ganas como compañía. Esto va también a los que nos ha tocado quedarnos, y ver cómo se marchan nuestros seres queridos, con la incertidumbre, sin saber cuándo, cómo y dónde volveremos a encontrarnos», concluyó.
En conversación con Cuba en Miami, Daniela nos reveló que aunque no ha emigrado, «es prácticamente un sueño» hacerlo, como para casi todos los jóvenes en la Mayor de las Antillas. Al tiempo que agregó su reflexión es «el resultado del entorno en el que vive».
«En el cual me ha tocado despedir a muchos familiares cercanos, por ejemplo a mi padre, mi hermana, mi hermano, amistades…y quedarme yo atrás con la incertidumbre de cuándo volveré a verlos, una triste realidad que los cubanos vivimos hoy en día», sentenció.
La joven se define en su cuenta de Instagram como «maquilladora en cuerpo y alma», y aunque lo suyo es el maquillaje artístico, también ofrece sus servicios para todo evento y ocasión.
Te invitamos a que visites sus redes y puedas apreciar otras de sus obras recientes, inspiradas en fantasía o realidad, pero también con interesantes reflexiones.
