Sin delito, sin juicio, sin libertad: cubano con I-220A lleva dos meses detenido por las autoridades de inmigración en Estados Unidos

Cubano arrestado por ICE. Foto: Video de Telemundo 51 Miami

Lo que comenzó como un procedimiento rutinario ha escalado a una tragedia invisible: ciudadanos cubanos con estatus I-220A —una orden de liberación bajo palabra— están siendo arrestados tras presentarse a sus audiencias de inmigración, sumergidos en una incertidumbre legal que contrasta con la esperanza inicial de integración. El caso de Rogelio Lázaro González Moya, detenido desde hace 77 días por ICE sin avance en su trámite, ilustra este escenario preocupante.

El caso emblemático: Rogelio, 77 días detenido bajo condiciones precarias

El 23 de junio de 2025, Rogelio fue arrestado inmediatamente después de su primera audiencia en una corte de inmigración en Miami, pese a que el proceso había sido desestimado en ese momento. Desde entonces, ha sido trasladado entre centros de detención en Krome (Miami), Texas, Florence (Arizona) y actualmente Eloy (Arizona).


Su familia denuncia condiciones inhumanas: pasó días en “congeladores”, estuvo encadenado en autobuses y aviones sin acceso adecuado a agua, alimentos y ningún tipo de confort básico. “Él está desesperado, sin poder defender su caso, sin entrevista de miedo creíble y tratado como si fuera un delincuente, cuando no lo es”, manifestó su cuñado Jorge Tirado Bientz.

La abogada Rosaly Chaviano critica la falta de plazos claros para la realización de la entrevista de «miedo creíble». “Lo que estamos viendo es, a lo mejor, una de las tácticas que usan para que las personas pierdan la paciencia y acepten ser deportadas. No hay una guía clara de cuándo deben hacer la entrevista de miedo creíble, pero las personas con I-220A tienen derecho a pedirla y a contar con representación legal”, resaltó la jurista.

Su hermana Iriatna Miranda Moya también considera injusta la decisión de mantenerlo encarcelado cuando el joven no cuenta con antecedentes criminales y ha pagado todos sus impuestos desde que llegó a los Estados Unidos.

“Estamos con las manos atadas, no sabemos qué va a pasar ni cuánto tiempo más estará detenido. Rogelio no es un criminal, él trabajaba y pagaba impuestos», lamentó la familiar.

¿Qué significa el estatus I-220A?

El I-220A no es un estatus migratorio —solo una orden de liberación bajo palabra (“Order of Release on Recognizance”)— que condiciona la libertad del detenido a su asistencia a futuras citas y cumplimiento de las normas establecidas por ICE.


Quienes cuentan con este documento pueden solicitar asilo y, en el país, demostrar un riesgo de persecución plausible. Sin embargo, desde septiembre de 2023, la Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA) dictaminó que el I-220A no equivale a un parole humanitario, cerrando así la ruta hacia la Ley de Ajuste Cubano —una vía tradicional para regularizarse en EE.UU. tras un año de residencia— para muchos cubanos.

Contexto más amplio: Operativos contra cubanos con I-220A y otros programas

En Florida, una ofensiva migratoria sin precedentes ha generado pánico entre migrantes hispanos, incluidos aquellos que, hasta hace poco, vivían con cierta estabilidad gracias al I-220A, parole humanitario o CBP One. Un memorándum federal de enero de 2025 permitió la deportación expedita de migrantes que no tienen casos de asilo sólidos o llevan menos de dos años en el país. La operación, bautizada como Operación Marea, detuvo a 1.120 personas en solo cinco días, conmocionando a comunidades que antes sentían cierta protección.

Abogados aseguran que algunas audiencias están diseñadas para que los migrantes desistan de sus casos bajo el pretexto de que “no son prioridad para deportación”, solo para luego arrestarlos al salir del tribunal. Esta estrategia ha dejado a muchos cubanos en un limbo legal sin precedentes, incluso cuando creían estar cerca de regularizarse.

¿Qué implica legalmente este cambio? El caso Matter of Q. Li

En mayo de 2025, la BIA emitió una decisión clave en Matter of Q. Li: sostiene que quienes ingresaron sin inspección y fueron liberados con I-220A fueron técnicamente parole según la ley, aunque no se les haya otorgado un documento formal.

Este precedente fortalece los argumentos para reclamar la elegibilidad bajo la Ley de Ajuste Cubano, aunque también abre la puerta a que ICE use esta decisión para justificar nuevas detenciones, colocando nuevamente a estas personas en entrampamientos legales.

Voces en la comunidad: miedo, división y resignación

La comunidad cubana en EE.UU. vive una polarización dolorosa. Muchos aún apoyan políticas antiinmigrantes por su autoritarismo contra el régimen cubano, mientras otros se sienten traicionados y temen perder beneficios históricos. Más de 400.000 cubanos con I-220A están hoy sin poder regularizarse y sujetos a detención imprevisible.

El caso de Rogelio González Moya resume un patrón alarmante: migrantes cubanos con estatus I-220A, que antes encontraban cierta estabilidad, están ahora atrapados en una estrategia migratoria represiva. Sus órdenes de liberación ya no garantizan seguridad; la deportación acelerada y las demoras judiciales despojan a personas integradas legalmente de su tranquilidad y derechos fundamentales.

¿Cómo avanzar?

  • Un enfoque legal sólido es clave: contar con representación especializada puede marcar la diferencia para presentar un caso de asilo con pruebas contundentes.
  • Visibilidad pública: iluminar estas historias puede presionar por reformas estructurales y frenar tácticas migratorias opacas.
  • Política migratoria con equidad: el gobierno de EE.UU. debe reconsiderar la lógica de los operativos masivos y asegurar una audiencia justa para todos.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *