Powerball pone en juego $1.700 millones en Nochebuena: el “regalo” que podría cambiar una vida

Powerball Florida. Foto: Lotería de la Florida

El sorteo de Powerball previsto para la noche del 24 de diciembre (Nochebuena) llega con un premio mayor estimado en 1.700 millones de dólares, tras una prolongada racha de 46 sorteos consecutivos sin un ganador del jackpot. La cifra coloca a este bote entre los más altos en la historia del juego y vuelve a disparar la atención pública en una fecha especialmente simbólica para el consumo y las compras de fin de año.

El fenómeno tiene una explicación sencilla: cuando nadie acierta los seis números, el premio se “acumula” y crece, impulsando nuevas rondas de ventas de boletos. Sin embargo, detrás del entusiasmo también hay un recordatorio constante: ganar el premio mayor sigue siendo estadísticamente muy poco probable, con probabilidades cercanas a 1 entre 292,2 millones.


Un bote navideño alimentado por la racha sin ganador

De acuerdo con reportes nacionales, el último sorteo volvió a dejar el jackpot vacante y empujó el acumulado hasta los $1.700 millones, con el siguiente sorteo programado para Christmas Eve.

El ticket base cuesta $2 (sin contar opciones adicionales como multiplicadores), lo que contribuye a que el juego sea masivo cuando el premio entra en “modo histórico”: más personas compran, el bote crece y el ciclo se retroalimenta.

¿Cuánto se cobra realmente? Impuestos, retenciones y la diferencia entre “anunciado” y “neto”

El titular “$1.700 millones” no equivale a lo que recibe el ganador. En Powerball, el premio mayor se ofrece en dos modalidades:

La anualidad (annuity): el monto anunciado se paga en cuotas anuales durante cerca de 29 años, con variaciones según el esquema del juego y los rendimientos proyectados.

El pago único (cash option): para este bote navideño, los reportes sitúan el valor en efectivo en torno a $781,3 millones, pero esa cifra es antes de determinar el total final de impuestos.


A nivel federal, el punto clave es la retención obligatoria: el IRS exige que, en premios de lotería por encima de ciertos umbrales, se retenga 24% inicialmente como “regular gambling withholding”. Eso no siempre cubre el impuesto total: al declarar la renta, el ganador puede terminar debiendo más, según su tramo impositivo.

En paralelo, existe la realidad estatal: Florida no aplica impuesto estatal sobre premios de lotería, lo que suele reducir el impacto fiscal total para quienes ganan con boletos comprados en el estado (aunque el impuesto federal se mantiene).

La conclusión práctica es conocida por asesores financieros: el “neto” final depende de factores como ingresos del ganador, residencia fiscal, deducciones permitidas y reglas de reporte. Aun así, la referencia del 24% de retención federal es el punto de partida más común en premios grandes.

Comparación: ¿dónde encaja este bote entre los más grandes del Powerball?

Con $1.700 millones, el premio de Nochebuena se ubica en el grupo élite de botes históricos. La lista oficial de los mayores jackpots de Powerball incluye, entre otros:

El récord absoluto de $2.04 billones (2.040 millones de dólares, en español) ganado en California en noviembre de 2022; el bote de $1.765 billones de octubre de 2023 (California); y el de $1.586 billones de enero de 2016, compartido entre California, Florida y Tennessee.

En ese contexto, Reuters también lo describe como uno de los mayores premios en la historia del juego, reforzando la narrativa de “jackpot navideño” con alcance nacional.

El impacto económico en Florida: educación, comercios y flujo de dinero

Más allá del ganador, el efecto económico de la lotería se siente con fuerza en estados con alta participación como Florida. La Florida Lottery señala que aproximadamente una cuarta parte (alrededor de 25%) de cada ticket se transfiere al Educational Enhancement Trust Fund (EETF), un fondo que financia programas educativos según asignaciones del estado.

En términos agregados, un reporte de evaluación pública (OPPAGA) indica que en el año fiscal 2023-24 Florida registró ventas cercanas a $9.4 mil millones y transferencias al EETF por $2.4 mil millones, superando estándares legislativos, aunque con una leve caída frente al año anterior. El mismo informe atribuye parte del descenso a presiones económicas como inflación y tasas de interés, que pueden restringir presupuestos de consumo.

Además del componente educativo, la lotería también mueve dinero en el ecosistema minorista: la red de puntos de venta recibe comisiones y genera tráfico en tiendas, gasolineras y supermercados. Una nota sectorial de la industria de loterías destaca que la Florida Lottery reinvierte una parte muy alta de sus ingresos en la economía del estado mediante premios, comisiones a minoristas y transferencias a educación, y resalta el rol del programa Bright Futures en el financiamiento de estudios.

Entre la ilusión y la estadística: el lado menos visible del “regalo navideño”

El tamaño del bote suele convertir el sorteo en un evento cultural y mediático, especialmente en fechas como Nochebuena. Pero la matemática sigue siendo el factor dominante: el jackpot es extraordinario precisamente porque es difícil de ganar. En ese equilibrio entre expectativa y probabilidad se mueve el fenómeno Powerball, que mezcla entretenimiento, recaudación pública y una narrativa recurrente: la posibilidad —remota— de que una noche cualquiera, incluso en Navidad, cambie la vida de una persona.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *