
“El cierre de las fronteras en Nicaragua realmente dificulta el tránsito. Yo sí quisiera hacer un llamado a los emigrantes que quieren trasladarse a Estados Unidos que, mientras esta frontera esté cerrada, es un riesgo muy alto seguir haciendo el tránsito” dijo la vicepresidenta y canciller panameña, Isabel De Saint Malo.
El Gobierno de Luis Guillermo Solís tuvo que suspender la emisión de visados para los isleños a mediados de diciembre porque se declaró incapaz de recibir a más personas, por lo que más de mil cubanos se quedaron encerrados en Panamá.
Los emigrantes “tienen que tener la conciencia de que hay una frontera cerrada y mientras esa realidad no cambie realmente deben considerar otras opciones”, añadió De Saint Malo.
Panamá y Costa Rica acordaron con México trasladar a los cubanos en vuelos directos a distintas ciudadanas mexicanas, para que desde allí pudieran seguir su camino hacia Estados Unidos.
Según la Cancillería panameña, ya han llegado a México más del 70 % de los cubanos que llevaban varados más de 2 meses en la frontera con Costa Rica. El 30 % que falta irán saliendo en distintos vuelos hasta el 15 de marzo.
El acuerdo alcanzado con México solo beneficia a los 1.301 cubanos que quedaron atrapados en Panamá cuando Costa Rica dejó de expedir visados. Los que llegaron después y los que sigan llegando a partir de ahora quedarán fuera del acuerdo bilateral.




