
El gobierno decidió también ofrecerles la residencia permanente en México lo que es bastante inusual en la política migratoria del país, las autoridades cubanas habían rechazado con anterioridad la repatriación a la isla de los cubanos. La travesía de estos cubanos termino en tragedia para muchos que venían en la embarcación y para muchas familias, de los 32 cubanos que venían 15 murieron en el mar.
En un inicio las autoridades de México habían dicho que deportarían a los cubanos en virtud de los acuerdos migratorios con Cuba pero las autoridades de la isla se negaron a recibir a sus ciudadanos. «Cuba no reconoce a sus ciudadanos como tal, por lo que México les dará tiempo para legalizar su situación».
Los cubanos podrían ahora dirigirse a la frontera con Estados Unidos y solicitar asilo a las autoridades que por lo general permiten a los cubanos entrar bajo la política de pies secos pies mojados.





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