Mercado laboral en EE.UU pierde fuerza: el desempleo sube a máximos desde 2021 a pesar de la creación de nuevos empleos

El mercado laboral de Estados Unidos envió en noviembre señales mixtas que refuerzan la percepción de una desaceleración gradual de la economía. Aunque el país continuó creando empleos, la tasa de desempleo aumentó hasta el 4,6 %, su nivel más alto desde 2021, según el más reciente informe oficial de empleo difundido por el gobierno federal.

Durante noviembre, la economía estadounidense añadió alrededor de 64.000 puestos de trabajo, superando las previsiones de los analistas, que anticipaban un crecimiento más moderado. Sin embargo, este avance no fue suficiente para compensar el aumento del número de personas desempleadas, lo que llevó a un incremento de la tasa general de desocupación.

Antes de conocerse las cifras oficiales, los economistas consultados por Bloomberg anticipaban un aumento cercano a los 50.000 empleos. El dato final confirmó el peso del sector sanitario, que volvió a desempeñar un papel clave en la evolución del mercado laboral al sumar 46.000 nuevos puestos en el mes, consolidándose como uno de los principales motores de la creación de empleo este año.

El informe de noviembre también dejó señales menos alentadoras. El número de personas que trabajan a tiempo parcial no por elección, sino por falta de oportunidades a tiempo completo, se elevó hasta los 5,5 millones, lo que representa un incremento de 909.000 personas desde septiembre.

En paralelo, el desempleo de larga duración siguió afectando a una proporción significativa de la fuerza laboral: el 24,3% de los desempleados llevaba 27 semanas o más sin trabajo. Aunque esta cifra se moderó frente al máximo alcanzado en agosto, cuando llegó al 25,7%, continúa por encima del 23,1% registrado en el mismo periodo del año anterior, lo que evidencia tensiones persistentes en el mercado laboral.

«Casi no se han añadido empleos desde abril. Las ganancias salariales se están ralentizando. Ahora hay 710.000 personas más desempleadas frente a noviembre de 2024, escribió en su cuenta de X, Heather Long, economista jefe de la Navy Federal Credit Union.

The US economy is in a hiring recession.

Almost no jobs have been added since April.
Wage gains are slowing.
710,000 more people are unemployed now versus November 2024.

November +64,000 jobs
October -105,000 (impacted by shutdown)
September +108,000
August -26,000
July… pic.twitter.com/ULtXWyjTzk

— Heather Long (@byHeatherLong) December 16, 2025

Por otro lado, Nancy Vanden Houten, economista principal para Estados Unidos en Oxford Economics, señaló en un comunicado que el cierre del gobierno habría sido uno de los factores que incidieron en el repunte de la tasa de desempleo.

«El número de personas que perdieron el empleo permanentemente, que había ido aumentando, disminuyó. El crecimiento de la fuerza laboral también contribuyó a este incremento», comentó.

El reporte también incluyó revisiones relevantes de los meses anteriores. En octubre, la economía registró una pérdida neta cercana a los 105.000 empleos, una caída que estuvo influida por factores extraordinarios, entre ellos los recortes temporales derivados del cierre parcial del gobierno federal y la reducción de puestos en el sector público. Estas distorsiones han complicado la comparación directa entre meses y han generado cautela entre los analistas al interpretar la tendencia real del empleo.

Más allá de las cifras puntuales, el informe confirma un patrón que se viene consolidando desde mediados de año: el mercado laboral estadounidense está perdiendo impulso tras un prolongado período de fortaleza posterior a la pandemia.

Aunque el nivel de desempleo sigue siendo relativamente bajo desde una perspectiva histórica, el aumento sostenido de la tasa en los últimos meses sugiere que las condiciones laborales comienzan a ajustarse, especialmente para quienes buscan empleo o cambian de sector.

Sectores como el empleo público y algunas áreas vinculadas a servicios han mostrado mayor volatilidad, mientras que otros segmentos mantienen una demanda más estable. No obstante, el ritmo general de contratación es más lento que en años anteriores, un fenómeno que muchos economistas atribuyen al impacto acumulado de las tasas de interés elevadas y a una mayor cautela por parte de las empresas frente a un entorno económico menos predecible.

Este escenario tiene implicaciones directas para la política monetaria. La Reserva Federal ha señalado reiteradamente que la evolución del mercado laboral es un elemento clave para evaluar el equilibrio entre el control de la inflación y el crecimiento económico.

El aumento del desempleo, combinado con una creación de empleo más moderada, ha reforzado las expectativas de que el banco central podría considerar nuevos recortes de tasas de interés en los próximos meses, siempre que la inflación continúe mostrando señales de desaceleración.

Asimismo, el informe fue publicado con retraso debido a las interrupciones provocadas por el cierre parcial del gobierno, lo que subraya la complejidad del contexto institucional y económico en el que se producen estas cifras. Para analistas y responsables de políticas públicas, el desafío será determinar si los datos de noviembre representan un ajuste temporal o el inicio de una fase más prolongada de enfriamiento del mercado laboral.

En conjunto, el panorama laboral de noviembre refleja una economía estadounidense que sigue generando empleos, pero con menor dinamismo, mientras el desempleo aumenta de forma gradual. Este equilibrio frágil será determinante para las decisiones económicas de los próximos meses y para la evolución del crecimiento en 2026, en un contexto marcado por la incertidumbre monetaria y los ajustes estructurales del mercado de trabajo.