
Desde 2022, el pastor cubano Alain Toledano, quien vive exiliado en Estados Unidos, denunció recientemente que el gobierno cubano está bloqueando su regreso a la isla para estar con su hija mayor, quien sufre de cáncer avanzado.
Toledano expresó: “Yo no le debo nada al régimen comunista, sin embargo, no me permiten entrar en un momento humanitario como este, para poder estar con mi hija, para poder apoyar a los míos”, “Piense como piense. Crea lo que crea. Es mi derecho como cubano poder entrar a mi país”.
El año pasado obtuvo otra negativa al intentar viajar a la isla tras el fallecimiento de un familiar: “Me fui al aeropuerto y cuando llegué, por un momento sentí que estaba en Cuba, por la manera en que me trataron allí. La señorita que me tomó el pasaporte, llamó a otra persona, después a otra. Y me dijeron: “Señor, usted no puede viajar. El problema no es usted, el problema es Cuba”.
Ante las negativas y a pesar de que insistió en abordar su vuelo dijo: «Ahora no es Cuba quien me niega la entrada, son ustedes quienes me lo prohíben y le están siguiendo el juego al régimen, al no permitirme montar en ese avión”.
Toledano, líder del movimiento apostlico, pasó a ser un importante crítico del régimen cubano dentro de la isla.
Fue detenido en el 2020 por criticar la destrucción de una iglesia en Santiago de Cuba durante una transmisión en vivo por Facebook. En 2016, durante un viaje a Estados Unidos, las autoridades derribaron su propio lugar de culto.
En agosto de 2021, fue acusado de promover brotes. Aseguró haber reanudado las reuniones religiosas de acuerdo con las directrices establecidas por el gobierno cubano para abordar la crisis de la COVID-19.
“Yo creo que es una manera de vengarse. De hacer daño. No solo a mi persona, sino a todo aquel que piense diferente y se haya convertido en un objetivo militar para el régimen Cubano”, intuye el pastor cubano.
“Enfrentar un proceso como ese, sin medicamentos de ningún tipo para que ella pueda tomar, es bien difícil”, dijo sobre la segunda operación a la que debe someterse su hija Susana, dada las pésimas condiciones del sistema de salud en la isla.
“Aprovecho este medio para personalmente pedirle a las autoridades en Estados Unidos, que me permitan salvarle la vida a mi hija, en este país, porque en Cuba no hay ninguna esperanza para ella”, añade el pastor con la esperanza de que le conceda una visa humanitaria para su hija enferma.
Anteriormente, quienes enfrentaban restricciones de viaje a la isla se enteraban de ello en Cuba. Hoy en día, se les informa directamente en sus aeropuertos de salida. Ejemplos recientes incluyen a Anamely Ramos, activista asociada al Movimiento San Isidro, y la profesora universitaria Omara Ruiz Urquiola.