
Para los cubanos la declaración de impuestos es un tormento, es algo a lo que no estaban acostumbrados y según muchos de los nuevos empresarios están diseñados de una manera muy compleja. Las autoridades de la Oficina Nacional de Administración Tributaria de la República de Cuba (ONAT) están preocupados y por eso se encuentran dando cursos y desarrollando programas informáticos para facilitar la declaración de Impuestos. Los pequeños empresarios en Cuba tienen hasta el 30 de marzo para hacer sus declaraciones.





