Un niño se encuentra en estado crítico después que lo sacaran inconsciente de una piscina en una vivienda de Lauderdale Lakes la mañana de este lunes. Según informaron las autoridades, el incidente ocurrió alrededor de las 10:00 a.m. en una residencia ubicada en la cuadra 3300 de Northwest 22nd Court. Al llegar al lugar, los equipos de bomberos y paramédicos encontraron al menor sin signos de respuesta y le practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar en el sitio.
Tras lograr estabilizarlo parcialmente, lo trasladaron de urgencia al Broward Health Medical Center, donde recibe atención médica especializada. Hasta el momento, no se ha revelado su edad ni detalles sobre su evolución clínica. Según un testigo, una abuela le pidió ayuda para buscar a su nieto de 4 ó 5 años
Las circunstancias exactas que llevaron al menor a caer en la piscina siguen bajo investigación por parte de las autoridades locales. Este incidente resalta nuevamente la importancia de mantener medidas de seguridad alrededor de las piscinas, especialmente durante el verano, cuando los niños suelen pasar más tiempo cerca del agua.
Las autoridades exhortan a la comunidad a extremar precauciones y a no dejar a los menores sin supervisión en áreas donde haya cuerpos de agua, incluso dentro de propiedades privadas, teniendo en cuenta los episodios que siguen ocurriendo en el sur de Florida.
Este hecho para nada es aislado, a mediados del pasado mes una niña de cuatro perdió la vida después que se ahogara en una piscina en El Portal, Miami-Dade. Las autoridades recibieron una llamada sobre un ahogamiento en una residencia local lo que provocó el despliegue de médicos y bomberos en el lugar donde encontraron a la niña inconsciente y la transportaron a un hospital cercano donde posteriormente falleció.
Según trascendió, la madre había viajado desde Oklahoma con su hija y se encontraba hospedada temporalmente en la vivienda donde sucedieron los hechos. Tras una investigación preliminar, las autoridades de Miami-Dade emitieron una orden de arresto contra Neha Gupta, madre de la niña, a quien se le imputa el cargo más grave en el sistema penal de Florida: asesinato en primer grado.
La comunidad se mantiene a la expectativa de nuevos detalles que puedan esclarecer este trágico suceso que enluta a una familia y plantea interrogantes sobre la seguridad infantil en entornos domésticos, especialmente en propiedades con piscinas.
Florida tiene leyes muy estrictas para proteger, especialmente, a niños pequeños del riesgo de ahogamientos en piscinas residenciales. Esto se debe a que el estado lidera históricamente las estadísticas de muertes infantiles por ahogamiento en EE. UU.
Según datos oficiales, Florida se mantiene año tras año entre los estados con las tasas más altas de muertes por ahogamiento en menores de 1 a 4 años. La mayoría de estos casos ocurren en piscinas residenciales, donde bastan segundos de distracción para que un niño pequeño quede atrapado bajo el agua.
Para intentar frenar esta alarmante estadística, Florida promulgó en el año 2000 la Residential Swimming Pool Safety Act, estableciendo requisitos obligatorios de seguridad en piscinas nuevas o remodeladas en viviendas particulares. La ley exige que toda piscina tenga al menos un cerco de seguridad de cuatro pies, cubierta rígida aprobada capaz de soportar 485 libras, puertas de acceso seguras o con alarmas.
Además, recomiendan clases tempranas de natación y la capacitación en maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) para padres y cuidadores, como medidas adicionales para reducir las tragedias. Si bien las leyes son claras, la seguridad depende en gran parte de la responsabilidad de los adultos. Cada año, nuevas campañas educativas buscan recordar a las familias que las piscinas, aunque ofrecen diversión, también representan un riesgo mortal si no se mantienen bajo estrictas normas de seguridad.