
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) publicó nuevas aclaraciones sobre los requisitos que deben cumplir los residentes permanentes legales —titulares de la green card— al viajar fuera del país. La agencia busca prevenir confusiones y evitar que los inmigrantes pierdan su estatus por ausentarse más tiempo del permitido o sin la documentación necesaria.
¿Qué pueden hacer los residentes permanentes al viajar fuera de Estados Unidos?
USCIS aclara que salir del país no implica automáticamente la pérdida de la residencia, siempre y cuando el titular mantenga la intención de regresar y continuar viviendo en Estados Unidos. No obstante, hay límites de tiempo que los oficiales de inmigración consideran al evaluar los casos.
Las ausencias menores a seis meses no suelen generar problemas, mientras que las de seis a doce meses pueden provocar preguntas sobre si el residente sigue teniendo la intención de vivir en el país. En cambio, las ausencias mayores a un año hacen presumir que el residente ha abandonado su estatus, salvo que haya tramitado un permiso de reingreso (Formulario I-131) antes de viajar.
Estos plazos sirven como guía para los oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) al momento del reingreso, aunque cada caso se analiza individualmente.
¿Qué significa “mantener la intención de residir en Estados Unidos”?
El factor determinante para conservar la residencia no es únicamente el tiempo fuera del país, sino la intención demostrada de seguir viviendo en Estados Unidos. Para probar esa intención, los residentes deben mantener lazos verificables con el país.
Entre los principales ejemplos se encuentran tener una vivienda estable, mantener un empleo o negocio en territorio estadounidense, declarar impuestos como residente ante el Servicio de Rentas Internas (IRS), conservar cuentas bancarias activas y mantener lazos familiares o sociales en el país.
Si estos vínculos desaparecen o se debilitan, las autoridades podrían considerar que la persona ha trasladado su domicilio principal al extranjero, lo cual equivale a una renuncia implícita del estatus permanente.
¿Qué es el permiso de reingreso (Formulario I-131)?
El permiso de reingreso es un documento emitido por USCIS que autoriza a los residentes permanentes a ausentarse de Estados Unidos por más de doce meses y hasta un máximo de dos años, sin que se considere abandono de la residencia.
Debe solicitarse antes de salir del país, y el solicitante debe permanecer en Estados Unidos hasta completar la toma de huellas biométricas. Tiene una vigencia máxima de dos años desde su emisión y es especialmente útil para quienes viajan por motivos laborales, académicos o médicos. Sin embargo, este permiso no garantiza la entrada automática, ya que la decisión final siempre recae en el oficial de inmigración del puerto de entrada.
¿Qué pasa si un residente se queda más de un año fuera de EE.UU.?
Los residentes que permanezcan fuera del país por más de doce meses sin permiso de reingreso podrían perder su residencia permanente. En estos casos, deben solicitar una visa SB-1 de residente retornante ante el consulado estadounidense en el país donde se encuentren.
Este proceso no garantiza la aprobación, ya que el solicitante debe demostrar que su ausencia prolongada se debió a causas ajenas a su voluntad, como una emergencia médica o una crisis familiar grave.
Documentos que deben llevar los residentes permanentes al viajar
Antes de salir del país, USCIS recomienda verificar que se cuenta con toda la documentación vigente. Los residentes deben portar su tarjeta de residencia permanente (green card) válida, un pasaporte vigente o documento de viaje internacional, y el permiso de reingreso (I-131) si se planea una ausencia mayor a un año.
También es importante conservar pruebas de vínculos con Estados Unidos, como contratos de vivienda, recibos de pago o declaraciones de impuestos. Si la green card está próxima a vencer, debe renovarse antes del viaje, ya que un documento expirado puede impedir el reingreso o causar demoras en los aeropuertos.
¿Cómo afectan los viajes largos a la ciudadanía estadounidense?
Las ausencias prolongadas también pueden interrumpir el requisito de residencia continua necesario para solicitar la naturalización. En general, los residentes deben vivir en Estados Unidos de manera ininterrumpida por al menos cinco años —o tres si están casados con un ciudadano estadounidense— antes de poder solicitar la ciudadanía.
Una ausencia de más de seis meses puede reiniciar el conteo de residencia. Para evitarlo, los residentes pueden presentar el Formulario N-470, que permite preservar el tiempo acumulado si trabajan en el extranjero por razones oficiales, empresariales o religiosas.
Errores comunes que pueden costar la green card
USCIS señaló algunos errores frecuentes que ponen en riesgo la residencia permanente: no renovar la green card antes de su vencimiento, permanecer fuera del país más de un año sin permiso, declarar impuestos como “no residente”, vender la vivienda y trasladar el centro de vida al extranjero o no mantener empleo ni cuentas en Estados Unidos.
Cada uno de estos factores puede interpretarse como evidencia de abandono voluntario del estatus permanente.
Recomendaciones de USCIS antes de viajar al extranjero
La agencia migratoria recomienda planificar cada viaje con anticipación. Los residentes deben verificar la vigencia de su green card, solicitar el permiso de reingreso si el viaje durará más de un año, conservar evidencias de sus lazos con Estados Unidos y consultar con un abogado de inmigración si existen dudas sobre la duración o los riesgos del viaje.
Asimismo, USCIS aconseja evitar viajes frecuentes o prolongados, ya que pueden poner en duda la intención de residencia y afectar futuros trámites migratorios.
USCIS envía un mensaje claro a la comunidad inmigrante
El USCIS enfatiza que la residencia permanente es un privilegio que exige mantener vínculos reales con Estados Unidos. Tener una green card no equivale a libertad total para ausentarse indefinidamente; el estatus depende de la intención comprobada de vivir en el país y mantenerlo como hogar principal.
En resumen, los residentes permanentes deben planificar sus viajes con cuidado, mantener la documentación al día y conservar lazos sólidos con Estados Unidos para proteger su estatus y avanzar, eventualmente, hacia la ciudadanía estadounidense.



