
Un mural en la ciudad de Miami con la imagen del reguetonero cubano José Manuel Carbajal Zaldívar conocido entre la farándula cubana como El Taiger ha acaparado la atención de la comunidad cubana y un gran debate en las redes sociales. La cara del artista urbano no es en sí lo más llamativo sino la frase que se adjuntó a la misma que suele ser empleada por el exilio cubano.
El mural está enclavado en una agencia de envíos a Cuba con el nombre de EVS Cargo que se encuentra al noroeste de Miami específicamente en la avenida 37 y la calle 7. En la pared aparece la imagen de El Taiger sonriente como siempre y debajo frase «Prohibido Olvidar» que sin duda alguna está referida a la trágica muerte de uno reguetoneros más populares de género urbano cubano.
No obstante, esta expresión lleva consigo un profundo significado tanto político como emocional para numerosos cubanos en el exilio, lo que ha provocado controversia. Algunos atribuyen esta frase a los actos horrendos que ha realizado el régimen cubano contra sus nacionales como es el caso de la tragedia del Remolcador 13 de Marzo o el derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate en la década de los 90.
El propietario del establecimiento comentó en una entrevista con el periodista cubano Javier Díaz de Univisión que no buscaba generar controversia ni tener motivaciones políticas. Según su versión, el mural tenía como objetivo rendir un tributo personal al artista, quien falleció en octubre de 2024 en Hialeah a causa de un disparo en la cabeza.
“Yo puse ‘prohibido olvidar’ ahí sin pensar para nada en el exilio ni estas cosas, porque verdaderamente yo no tenía idea de eso. Ahora bien, tengo conocimiento de que la frase no está patentada por el exilio cubano”, manifestó en la conversación con el reportero cubano quien aseguró que no se involucra con asuntos de política, algo que tampoco le agradó mucho a quienes no olvidan las atrocidades de la dictadura y luchan día a día para que Cuba sea libre.
Diana Fernández en contraste dijo al mismo medio que «es una frase que usa el exilio para no olvidar los desmanes de la dictadura” y el artista no se considera una persona especial como muchos intentan hacer creer. “Lo siento mucho por las personas que lo tienen como un `héroe’, pero para nosotros él no es un ‘héroe’, nunca se comportó como una persona que representara a la comunidad”, agregó la mujer quien aseguró que el intérprete de «La Historia» era simpatizante del régimen de La Habana. Asimismo, instó al propietario del negocio a que se ponga del lado de los dolidos y piense en lo que sienten al ver esa frase.
Un factor adicional que incrementa la tensión en este asunto es que el dueño del establecimiento no se comunicó previamente con los administradores del legado del artista para obtener permiso para utilizar su imagen. Hasta el momento, no se han hecho públicas iniciativas legales, sin embargo, Univision prevé una posible comunicación entre las dos partes con el fin de alcanzar un consenso.
El debate ha resonado intensamente en las plataformas digitales, provocando reacciones muy divididas entre los usuarios: algunos apoyan la libertad de expresión y argumentan que el exilio no controla el lenguaje ni una expresión específica; mientras que otros consideran que la existencia de ese mural es una ofensa hacia el exilio.
Las reacciones de los usuarios no se hicieron esperar y muchos rechazaron la elaboración de este mural que para ellos no representa al exilio. “Ese negocio es del desgobierno de Cuba”. “Promoción a un delincuente, sentimentalismo directo al pan con bistec”. “Lo siento, pero no representa a la comunidad, él apoyaba la dictadura”. “Ese mural es una falta de respeto a la memoria del verdadero exilio”. “Las agencias dicen que no hablan de política, pero utilizan frases de luchadores políticos”, dijeron.
En respuesta a esta situación, una de las justificaciones más comunes para respaldar el mural fue la oposición a que una comunidad tenga el derecho exclusivo sobre el idioma español o sus formas de expresión. En plataformas sociales, numerosos usuarios hicieron comentarios sarcásticos al respecto con expresiones tales como: “¿Ahora el exilio es dueño del idioma español?” o “Esa frase no la inventaron ellos”.
Algunos argumentaron que es una expresión bastante usual en todo el mundo y que nadie tiene derechos exclusivos sobre ella, subrayando la noción de que el lenguaje no puede ser reclamado por nadie. Estas perspectivas critican lo que perciben como un exceso de vigilancia y reactividad hacia emblemas que, en una sociedad democrática, deberían ser accesibles para todos.
El fresco dedicado a El Taiger en Miami vuelve a despertar recuerdos dolorosos en la comunidad cubana exiliada, mostrando lo complicado que resulta disociar el arte de la historia política. Para algunos, se trata de un homenaje justificado a un creador, mientras que otros lo consideran una falta de respeto hacia un emblema cargado de sufrimiento.