
El popular reguetonero cubano Yosvany Sierra Hernández, conocido artísticamente como Chocolate MC, compareció este miércoles ante un tribunal del condado Miami-Dade, donde comenzó su juicio por presuntas amenazas realizadas en redes sociales contra Damián Valdez-Galloso el individuo implicado como presunto responsable del asesinato del también reguetonero El Taiger.
El proceso judicial se activa luego de que el artista rechazara un acuerdo de culpabilidad ofrecido por la fiscalía, decisión que lo expone a una posible condena de cadena perpetua.
El juez Hirsch lanza una advertencia contundente
El juicio, presidido por el juez Milton Hirsch, inició con un ambiente tenso. En la primera audiencia, el magistrado advirtió al cantante cubano sobre la gravedad de los cargos y las posibles consecuencias legales de su decisión de ir a juicio. “Si es hallado culpable, podría enfrentar una sentencia de por vida”,
habría señalado el juez, según reportes locales.
La advertencia dejó claro el riesgo que enfrenta el artista, quien en lugar de aceptar un acuerdo negociado que habría reducido su pena, optó por defender su inocencia ante el jurado.
Un proceso con alto perfil mediático
El caso de Chocolate MC ha generado un enorme interés en la comunidad cubana de Miami y en el mundo del reguetón. El artista, conocido por sus letras provocadoras y su carácter explosivo, enfrenta acusaciones derivadas de mensajes publicados en redes sociales supuestamente dirigidos a Damián.
Los fiscales sostienen que el cantante urbano Chocolate utilizó su cuenta de Instagram para lanzar un mensaje provocador: habría prometido una recompensa de 100 mil dólares a quien atacara a Galloso.
El juez Milton Hirsch determinó que esos mensajes constituían “amenazas reales y directas” contra una persona identificable, representando un riesgo para su seguridad y un acto criminal bajo las leyes de Florida. Los fiscales insisten en que no se trata de simples expresiones artísticas, sino de un llamado a la violencia.
Defensa: “Fue una reacción emocional, no una amenaza real”
El abogado de Chocolate MC argumentó que las publicaciones en redes sociales no deben interpretarse literalmente, sino dentro del contexto emocional y artístico del cantante. Según su defensa, Sierra actuó bajo una fuerte carga emocional tras conocer la noticia del asesinato de su colega y no tuvo la intención de causar daño real.
Además, insistió en que los mensajes forman parte de su personaje público, una figura impulsiva y polémica que usa las redes para expresarse en tono provocador, como parte de su estilo musical.
La víctima invoca la Quinta Enmienda
Uno de los giros más notables del proceso ha sido la decisión de Damián Valdez Galloso, la persona presuntamente amenazada, de acogerse a la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que protege el derecho a no autoincriminarse. Con esta medida, Galloso no testificará en el juicio, lo que dificulta la estrategia de la fiscalía y podría reducir la contundencia de las pruebas en su contra.
La familia del artista desde el primer momento ha estado al pendiente del proceso judicial y alegan que a él se le debe dar otra oportunidad. «Él sabe que nosotros siempre vamos a estar juntos, así como él ha estado cono nosotros, somos una familia muy unida y siempre hemos estado en todos los momentos. Tiene días que se quiebra (…) me llama llorando, me dice hermana ya no puedo más», dijo a Telemundo 51, Isis Sierra quien es hermana del artista y también reside en Miami.
Su madre Odalis Hernández desde España también ha expresado preocupación por el juicio de Chocolate y en ese sentido hizo una petición al jurado elegido para decidir. «Yo quisiera pedirle al jurado que sea benevolente, y que en vez de juzgarlos con toda la fuerza y el peso de la ley, que me lo ayuden a tener tratamiento psicológico», expresó Hernández.
Yelena Ramírez, pareja del cantante, mostró una actitud esperanzada frente al inicio del juicio, al considerar que la confirmación de la fecha para el día 10 marca un cambio alentador tras una serie de retrasos y postergaciones. Según expresó, el hecho de que finalmente se haya establecido un día concreto representa un paso positivo dentro del largo proceso que ha enfrentado el músico.
De las redes sociales al banquillo de los acusados
El caso de Chocolate MC vuelve a poner sobre la mesa un debate de fondo: los límites entre la libertad de expresión y la responsabilidad penal en las redes sociales.
El uso del lenguaje violento, las amenazas y las declaraciones impulsivas se han convertido en terreno de análisis judicial, especialmente cuando provienen de figuras públicas con gran número de seguidores.
En el caso del reguetonero, su presencia en plataformas digitales es parte esencial de su carrera, pero también ha sido fuente de conflictos y controversias legales previas. En años anteriores, el artista enfrentó otros procesos por violencia doméstica y alteración del orden público, aunque ninguno con la gravedad del actual.
Trayectoria y polémicas del “Rey del Reparto”
Nacido en Pinar del Río, Cuba, Chocolate MC emigró a Estados Unidos hace varios años, consolidándose como una de las voces más representativas del género urbano cubano. Conocido como el “Rey del Reparto”, ha cosechado éxitos dentro de la comunidad latina en Miami, pero su carrera ha estado marcada por episodios de confrontación con otros artistas, arrestos y sanciones.
Aun así, mantiene una base de fanáticos leales que lo defienden como un artista auténtico y sin filtros, mientras sus detractores lo señalan por su comportamiento impredecible y su lenguaje violento.
Los próximos pasos del proceso judicial
Tras completarse la selección del jurado, el juicio continuará con la presentación de evidencias, testigos y declaraciones de ambas partes. Los jurados deberán determinar si las publicaciones del músico constituyeron una amenaza real o si, como sostiene la defensa, fueron simples expresiones artísticas desprovistas de intención criminal.
De ser hallado culpable, Chocolate MC podría enfrentar una de las condenas más severas impuestas a un artista latino en Estados Unidos por delitos vinculados a redes sociales.
El caso, seguido de cerca por medios y fanáticos, se perfila como un precedente judicial en materia de libertad de expresión digital y su impacto en la vida pública de las celebridades. El juicio de Chocolate MC no solo define el futuro de un artista polémico, sino que también plantea una reflexión sobre cómo el poder de las palabras y las redes sociales puede convertirse en un arma legal, con consecuencias que trascienden el mundo de la música.




