Un buen samaritano en Miami rescato a cerca de 14 tortugas bebé que se extraviaron y terminaron en su piscina para luego devolverlas al océano.
Según la publicación en Only in Dade las 14 tortugas fueron devueltas sanas y salvas al oceano.
«Es por eso que los edificios a lo largo de las playas TIENEN QUE apagar sus luces durante la temporada de tortugas. Las luces artificiales de los edificios a lo largo de la playa pueden desorientar y confundir a las tortugas bebés, alejándolas del océano y hacia áreas peligrosas como piscinas, caminos u otras fuentes de luz artificial.» dijo el comunicado en la publicación.
Molestar a las tortugas durante la temporada donde anidan en Miami Beach puede llevar a fuertes multas e incluso prisión.