Como parte de las reformas económicas del gobierno de Raúl Castro esta entregar tierras ociosas a campesinos para así aumentar la producción pero estas no están dando resultado. Cuba gasta 1.500 millones de dólares anualmente en importar alimentos en un país donde la agricultura debía de ser su principal fuerte económico. La agencia de noticias EFE reporto que desde el 2008 hasta la fecha un total de 176.000 cubanos han recibido tierras para trabajarlas pero el estado no ha podido cuantificar los resultados.
En ocasiones anteriores los dirigentes del país han asegurado que mejorar la agricultura es un asunto de «seguridad nacional» pero en los últimos cuatro años las reformas en la agricultura parecen ser un fracaso total. Los cubanos importan el 80% de los alimentos que consumen algo que pocos entienden dado que Cuba fue tradicionalmente un país agrícola.
Como todo en Cuba las cosas se hacen sin seguir procedimientos lógicos y por el contrario con exceso de regulaciones, de los 176.000 cubanos que han recibido tierras el mismo gobierno ha confirmado que el 75% no tiene experiencia previa en el trabajo agrícola lo que explica la poca productividad de las tierras.
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