Aeropuertos del sur de Florida vetan mensaje político de Kristi Noem sobre el cierre del gobierno

Los aeropuertos internacionales de Miami (MIA) y Fort Lauderdale-Hollywood (FLL) anunciaron oficialmente que no transmitirán el video grabado por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en el que se responsabiliza a los demócratas por el actual cierre del gobierno de Estados Unidos.

La decisión, adoptada por las autoridades aeroportuarias locales, se enmarca en un contexto de creciente tensión política y operativa en todo el país, a raíz de la suspensión parcial de fondos federales que ha afectado a miles de empleados gubernamentales, incluyendo personal de seguridad aérea.


Un mensaje que generó polémica

El video en cuestión fue producido y difundido por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), con la intención de explicar las consecuencias del cierre del gobierno sobre las operaciones de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA).

En el mensaje, Kristi Noem afirma que los empleados federales —incluidos miles de agentes de la TSA— continúan trabajando sin recibir sus salarios debido a la falta de acuerdo en el Congreso, y señala a los legisladores demócratas como responsables del estancamiento presupuestario.

«Los demócratas en el Congreso se niegan a permitir la financiación del gobierno federal, y debido a esto, muchas de nuestras operaciones se ven afectadas, y la mayoría de nuestros empleados de la TSA trabajan sin paga”, dijo Noem.

El contenido fue percibido como partidista y políticamente cargado, lo que motivó la reacción inmediata de las administraciones de varios aeropuertos, incluyendo los del sur de Florida, que optaron por no emitirlo en sus terminales para mantener la neutralidad institucional.

Postura de los aeropuertos del sur de Florida

Desde el Aeropuerto Internacional de Miami, la portavoz Greg Chin, aclaró que el sistema de pantallas continuará mostrando el material habitual de la TSA, especialmente los mensajes informativos sobre seguridad y el cumplimiento del programa Real ID, descartando cualquier contenido político.


“En MIA, valoramos y apoyamos profundamente a nuestros socios de la TSA y el papel vital que desempeñan para garantizar la seguridad de nuestros pasajeros todos los días. Para ser consistente con la política del condado de Miami-Dade con respecto a la mensajería dentro de la terminal, MIA continuará reproduciendo el video de concientización de Real ID existente de la TSA, que brinda a los pasajeros información importante y urgente directamente relacionada con su experiencia de viaje y los requisitos federales”, dice el comunicado de Chin.

Por su parte, el Aeropuerto de Fort Lauderdale-Hollywood explicó que su reglamento interno prohíbe expresamente la difusión de mensajes de naturaleza política o religiosa, subrayando su compromiso con la imparcialidad y con el objetivo de no utilizar espacios públicos para la promoción ideológica de ningún tipo.

«El video de la TSA en cuestión no se está reproduciendo en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood (FLL) ya que nuestra política publicitaria no permite que se muestren mensajes políticos en nuestras instalaciones», dice el comunicado de este aeropuerto.

Ambas terminales enfatizaron que los aeropuertos son infraestructuras de uso público, pero no foros públicos designados, lo que les da margen para decidir qué tipo de contenido se exhibe en sus instalaciones.

La Ley Hatch y la neutralidad institucional

La controversia ha reavivado el debate sobre los límites de la comunicación política dentro de instituciones federales. Expertos en derecho administrativo han recordado que la Ley Hatch de 1939 impide a empleados y agencias federales participar en actividades que puedan interpretarse como proselitismo partidista.

De acuerdo con estos analistas, la difusión del video de Noem podría considerarse una violación indirecta de dicha normativa, al utilizar recursos públicos para enviar un mensaje con implicaciones políticas.

El caso pone de relieve el papel de los aeropuertos como espacios donde se cruzan jurisdicciones locales y federales, pero donde prevalece la necesidad de mantener un entorno neutral, especialmente en momentos de tensión política nacional.

Reacciones en otros aeropuertos del país

La decisión de Miami y Fort Lauderdale no es aislada. Charlotte, Atlanta, Phoenix y Seattle también optaron por no emitir el mensaje, citando razones similares relacionadas con regulaciones internas y la prohibición de usar instalaciones públicas para fines políticos.

Autoridades del aeropuerto Harry Reid de Las Vegas dijeron que ellos tienen en cuenta la Ley Hatch. “Según las regulaciones aeroportuarias, las terminales y las áreas circundantes no son foros públicos designados, y la intención del aeropuerto es evitar el uso de la instalación para la promoción política o religiosa”, destaca.

En algunos casos, las administraciones aeroportuarias señalaron que no fueron notificadas formalmente por el DHS sobre la intención de difundir el video, y que el contenido no pasó por los filtros de aprobación habituales antes de intentar ser transmitido en los sistemas de información al pasajero.

Impacto del cierre del gobierno en el transporte aéreo

Mientras la disputa política se mantiene, el cierre del gobierno federal ya está afectando el funcionamiento diario de la aviación comercial. Según cifras oficiales, alrededor de 61,000 de los 64,130 empleados de la TSA continúan trabajando sin recibir pago, garantizando la seguridad en los aeropuertos pese a la falta de financiamiento.

La Asociación de Empleados de Transporte ha expresado su preocupación por la fatiga, la reducción de personal y el riesgo de retrasos en los controles de seguridad si el cierre se prolonga.

En paralelo, líderes demócratas y republicanos continúan enfrentados sobre el presupuesto federal. Las diferencias giran en torno al financiamiento de programas de salud, seguridad fronteriza y defensa, mientras el impacto económico del cierre comienza a sentirse en varios estados, incluido Florida.

Un reflejo de la polarización nacional

El episodio del video de Kristi Noem es un nuevo ejemplo de cómo la polarización política se filtra en las instituciones públicas. Lo que comenzó como un mensaje institucional terminó convertido en un símbolo de la disputa entre el gobierno federal y los estados.

En los aeropuertos del sur de Florida, la decisión de mantener la neutralidad fue recibida con respaldo por la comunidad local, que ve en ella una defensa del carácter cívico y apolítico de los espacios públicos, en un momento en que el país enfrenta divisiones profundas y tensiones crecientes por el cierre del gobierno.

Mientras la Casa Blanca y el Congreso buscan una salida a la crisis presupuestaria, los aeropuertos del sur de Florida reafirman su papel como espacios de servicio público, no de propaganda política.

La controversia en torno al video de Kristi Noem deja una lección sobre los límites del discurso político institucional y la importancia de preservar la confianza ciudadana en las entidades que, día a día, sostienen la infraestructura del país.


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