¿Patrocinaste a un inmigrante? Abogado advierte que podrías enfrentar responsabilidades legales inesperadas

Un video reciente que difundió el periodista cubano Daniel Benítez ha encendido las alarmas entre miles de inmigrantes y patrocinadores en Estados Unidos. El contenido, ampliamente compartido en redes sociales y grupos comunitarios latinos, advierte sobre las posibles consecuencias legales y económicas que podrían enfrentar quienes han patrocinado a familiares u otras personas en procesos migratorios, especialmente en un contexto de mayor rigor en la aplicación de la ley.

La publicación ha generado inquietud porque toca un punto poco comprendido por muchas familias: el patrocinio migratorio no termina necesariamente cuando se aprueba la residencia, y puede implicar compromisos que se extienden durante años.

El patrocinio migratorio y su verdadero alcance legal

El reportero estuvo acompañado virtualmente por el abogado de inmigración Jesús Novo quien subraya que uno de los errores más comunes es asumir que el patrocinio es un simple requisito administrativo. En realidad, al firmar el formulario I-864, conocido como Declaración Jurada de Patrocinio Económico, el patrocinador establece un contrato legal vinculante con el Gobierno de Estados Unidos.

Este compromiso obliga al patrocinador a garantizar que el inmigrante no dependa de ciertos beneficios públicos. Si la persona patrocinada recibe ayudas consideradas reembolsables por la ley, el Estado podría, en determinados escenarios, exigir el reembolso de esos fondos al patrocinador.

La obligación no desaparece automáticamente con la obtención de la green card. Puede mantenerse vigente hasta que el inmigrante se naturalice, acumule 40 trimestres de trabajo reconocidos, abandone el país de forma permanente o fallezca.

¿Realmente el Gobierno puede exigir esos pagos?

Aunque la ley contempla esa posibilidad, el abogado aclara que no se trata de una práctica automática ni generalizada. Para que exista un reclamo económico deben darse condiciones muy específicas y evaluarse caso por caso.

Sin embargo, el solo hecho de que la opción exista legalmente ha generado preocupación, sobre todo en un momento en que las políticas migratorias muestran una tendencia más estricta y fiscalizadora. Muchos patrocinadores temen enfrentar consecuencias por decisiones tomadas años atrás, cuando el panorama político y legal era distinto.

Un clima migratorio que aumenta la incertidumbre

La difusión del video ocurre en medio de un ambiente de creciente tensión migratoria. En los últimos meses, se han intensificado los mensajes oficiales sobre control, cumplimiento de normas y revisión de estatus, lo que ha incrementado la percepción de riesgo entre comunidades inmigrantes.

Este contexto ha hecho que advertencias como la planteada por el abogado tengan un impacto mayor, alimentando dudas sobre posibles cartas de cobro, revisiones retroactivas o responsabilidades financieras inesperadas.

Reacciones en redes sociales: miedo, sorpresa y enojo

Las redes sociales se han llenado de comentarios de patrocinadores y familiares preocupados. En plataformas como Facebook, TikTok y X, muchos usuarios expresaron sorpresa al descubrir que el compromiso legal podía extenderse tanto tiempo.

“Yo firmé para ayudar a mi hermana, no para quedarme endeudado de por vida”, escribió un usuario en un grupo de inmigración en Facebook. Otro comentario, replicado decenas de veces, señalaba: “Nunca nos explicaron esto cuando hicimos el proceso, solo nos dijeron que era un requisito más”.

También hubo reacciones de enojo y frustración. “Cumplimos la ley, pagamos abogados, hicimos todo bien y ahora parece que igual nos quieren castigar”, comentó una patrocinadora en TikTok, mientras que otros usuarios pidieron mayor transparencia por parte de las autoridades migratorias y los propios abogados.

El llamado de los expertos: no entrar en pánico, pero informarse

Abogados y organizaciones comunitarias coinciden en que no es momento de entrar en pánico, pero sí de informarse. Recomiendan no ignorar ninguna notificación oficial y, al mismo tiempo, no asumir responsabilidades sin antes consultar con un abogado de inmigración calificado.

El propio Daniel Benítez enfatiza que su mensaje es preventivo. Su objetivo, según explica, es que las personas comprendan mejor los documentos que firman y las implicaciones a largo plazo, especialmente quienes estén considerando patrocinar a un familiar en el futuro.

Un debate que vuelve a la agenda pública

El tema reabre un debate recurrente en Estados Unidos: hasta qué punto es justo que ciudadanos y residentes permanentes asuman responsabilidades económicas prolongadas por haber ayudado legalmente a un familiar a emigrar.

Mientras no exista un anuncio oficial de cambios en la aplicación de estas normas, la preocupación seguirá creciendo en redes y comunidades migrantes. La falta de información clara y accesible continúa siendo uno de los principales reclamos.

El video que circula en redes ha servido como una llamada de atención para miles de patrocinadores que desconocían el alcance real de su compromiso legal. En un escenario migratorio cada vez más complejo, la asesoría legal, la información verificada y la transparencia se vuelven claves para evitar errores costosos y decisiones tomadas desde el miedo.