«Caribe en máxima alerta»: Huracán Melissa de categoría 5 mantiene fuerza devastadora sobre Jamaica y afectará al oriente cubano en las próximas horas

Huracán Melissa. Foto: Video de YouTube de Canal Caribe

El huracán Melissa, con vientos sostenidos de 260 kilómetros por hora, mantiene su estatus de categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, mientras azota directamente a Jamaica y avanza lentamente hacia el oriente cubano, donde las autoridades activaron alertas y medidas de emergencia ante un posible impacto entre la noche del martes y el miércoles.

Un sistema extremadamente peligroso

Según dijo el Centro Nacional de Huracanes (NHC) en su boletín de las 8:00 am de este lunes, el ojo de Melissa se ubica a unos 220 kilómetros al suroeste de Kingston y a 515 kilómetros de Guantánamo, desplazándose al oeste a unos 6 km/h. La presión central mínima se estima en 913 milibares, un valor que refleja su enorme potencia.


Los pronósticos indican que el ciclón podría girar hacia el noroeste y luego al norte antes de acelerar al noreste, acercando su centro peligrosamente al territorio cubano. Meteorólogos advierten que Melissa podría experimentar fluctuaciones de intensidad y mantener vientos potencialmente catastróficos en las próximas 24 horas.

Jamaica bajo condiciones catastróficas

El primer ministro jamaicano Andrew Holness declaró el país en “estado de emergencia nacional”, mientras fuertes ráfagas de viento arrancan techos, derriban postes eléctricos y bloquean carreteras. Se han reportado marejadas de hasta cuatro metros, lluvias de entre 380 y 760 milímetros (15-30 pulgadas) y cortes masivos de energía en el sur y suroeste del país.

Miles de personas fueron trasladadas a refugios improvisados en escuelas e iglesias, mientras las autoridades piden evitar desplazamientos innecesarios. En Kingston, brigadas de rescate han atendido varios derrumbes y desbordamientos de ríos.

Cuba refuerza su defensa civil ante el avance del ciclón

En Cuba, las provincias de Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma y Holguín están bajo aviso de huracán, y Las Tunas bajo aviso de tormenta tropical. El Instituto de Meteorología (INSMET) prevé lluvias acumuladas entre 250 y 380 milímetros, con posibles máximos de hasta 500 milímetros en zonas montañosas, lo que eleva el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra.

Las autoridades han ordenado el aseguramiento de techos y estructuras, la protección de alimentos y agua potable y la evacuación preventiva en comunidades costeras y de montaña. El general Ramón Pardo Guerra, jefe de la Defensa Civil, pidió a la población “no subestimar la fuerza del fenómeno” y mantener vigilancia constante ante la posibilidad de marejadas ciclónicas y vientos superiores a los 200 km/h en la costa sur oriental.


Las lluvias son un factor tener en cuenta por parte de la población de acuerdo con los expertos ya que en Jamaica se prevén entre 15 y 30 pulgadas, en la zona oriental de la Mayor de las Antillas entre 10 y 15 pulgas llegando a 20 en algunas zonas específicas, mientras que en Haití los acumulados rondarán las 8 y 16 pulgadas de precipitaciones.

Impacto potencial y trayectoria

Si mantiene su rumbo actual, Melissa podría rozar o tocar tierra en el extremo oriental cubano antes de continuar hacia el Canal de las Bahamas o el Atlántico occidental. De confirmarse esa trayectoria, dejaría afectaciones severas en viviendas, plantaciones agrícolas, sistemas eléctricos y carreteras costeras.

Los especialistas del NHC alertan que, incluso sin un impacto directo, los efectos asociados a la lluvia y la marejada podrían sentirse en todo el oriente cubano y parte del centro del país.

Una temporada ciclónica fuera de lo común

Melissa es ya el huracán más intenso del Atlántico en 2025 y el segundo de categoría 5 de esta temporada, que ha mostrado una actividad inusualmente alta debido a las temperaturas récord del mar Caribe y la persistencia del fenómeno de El Niño.

Expertos advierten que la combinación de océanos más cálidos y patrones atmosféricos inestables está incrementando la frecuencia e intensidad de los huracanes en el Atlántico tropical, una tendencia que preocupa especialmente a las islas del Caribe y al sur de Florida.

Llamado a la prudencia

Las autoridades cubanas y jamaicanas insisten en que la prioridad es proteger vidas humanas, y recomiendan a la población seguir únicamente fuentes oficiales de información. El NHC y los institutos meteorológicos de la región emitirán actualizaciones cada tres horas.

Mientras tanto, el Caribe central se prepara para enfrentar una de las jornadas más críticas de la temporada ciclónica 2025, con el huracán Melissa amenazando con repetir el poder destructivo de sistemas históricos como Gilbert (1988) o Dean (2007).

Recomendaciones ante el paso de un huracán

1. Siga solo fuentes oficiales:
Manténgase informado a través del Instituto de Meteorología (INSMET), el Centro Nacional de Huracanes (NHC) y los comunicados de la Defensa Civil. Evite difundir rumores o información no verificada en redes sociales.

2. Prepare un kit de emergencia:
Incluya agua potable (al menos tres litros por persona por día), alimentos no perecederos, linterna, pilas, radio portátil, medicamentos, documentos personales, dinero en efectivo y ropa seca.

3. Refuerce su vivienda:
Asegure techos, puertas y ventanas. Retire objetos del exterior que puedan convertirse en proyectiles (macetas, antenas, carteles, herramientas).

4. Planifique una ruta de evacuación:
Identifique el refugio más cercano y cómo llegar hasta él. Si las autoridades emiten una orden de evacuación, obedezca de inmediato y lleve consigo lo imprescindible.

5. Proteja a niños, ancianos y mascotas:
Los menores y las personas mayores deben permanecer en zonas seguras, alejadas de ventanas. Mantenga a los animales bajo resguardo con alimento suficiente y sin posibilidad de escapar.

6. Desconecte servicios básicos:
Antes del impacto, cierre válvulas de gas, corte la electricidad si es seguro hacerlo y evite usar velas para prevenir incendios.

7. Evite salir durante y después del huracán:
No camine ni conduzca por calles inundadas; el agua puede ocultar cables eléctricos o corrientes peligrosas. Espere las instrucciones de las autoridades antes de salir.

8. Después del huracán:
Revise posibles daños estructurales, evite zonas con cables caídos y consuma solo agua potable. Ayude a sus vecinos más vulnerables y mantenga la calma hasta que se restablezcan los servicios básicos.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *