La creciente ola de inseguridad en la capital cubana tuvo un nuevo episodio que ha generado indignación en redes sociales y en la comunidad digital: el youtuber cubano “Vámonos Con Juanka”, conocido por sus videos solidarios y su trabajo social en barrios vulnerables, fue víctima de un robo en pleno corazón de La Habana Vieja, frente al histórico Hotel Inglaterra.
El hecho ocurrió en la madrugada del viernes 18 de julio, alrededor de las 6:16 a.m., cuando Juanka se encontraba en el portal del emblemático hotel, ubicado en el Paseo del Prado. Según narró en un video posterior, había estado grabando contenido y decidió descansar allí mientras tomaba un café y esperaba el amanecer. Sin embargo, el agotamiento físico lo venció y se quedó dormido por unos minutos, lo que fue aprovechado por un ladrón para cometer el robo.
El delincuente, aprovechando el descuido y la falta de vigilancia, se llevó una bolsa que el youtuber tenía a su lado. En su interior había un teléfono Redmi Note 11, dos carteras con dinero en efectivo, documentos personales, tarjetas bancarias y dos frascos de perfume. El guardia del hotel lo despertó, pero ya era demasiado tarde: el ladrón había huido y no hubo forma de rastrearlo.
Juanka, visiblemente afectado, denunció que tanto las cámaras del hotel como las de la cuadra estaban fuera de servicio, lo que imposibilita contar con grabaciones del momento del robo. Además, lamentó que no hubiera presencia policial en una zona tan concurrida y turística como esa, especialmente durante horas críticas de la madrugada.
«Me pregunto cómo pueden existir estas irregularidades de seguridad en una esquina tan concurrida, tan transitada y tan peligrosa a la vez. A esto súmale que normalmente no existen los agentes del orden o policías ni de día y mucho menos de noche. Rara vez se ve alguno, pero rara vez, o se pueden ver varios cuando se acercan fechas del tipo políticas algo complicadas, fuera de eso, totalmente desprotegida el área», denunció el creador de contenido.
«Me lo han robado todo, y hoy me siento devastado, no sé cómo describirlo, se siente un dolor muy fuerte y profundo, como si te hubieran vaciado el cuerpo», expresó con firmeza el youtuber en su testimonio.
La denuncia generó una ola de solidaridad entre sus seguidores, quienes llenaron sus redes sociales de mensajes de apoyo. Muchos lamentaron la falta de seguridad en espacios públicos y exigieron a las autoridades que se tomen medidas para proteger a los ciudadanos, en especial a figuras que, como Juanka, están activamente comprometidas con causas sociales.
No es la primera vez que se reportan incidentes similares en la zona del Parque Central, uno de los principales polos turísticos de La Habana. A pesar de la presencia de patrullas policiales en horarios diurnos, muchos ciudadanos han denunciado una notable ausencia de vigilancia efectiva durante la madrugada, lo que ha convertido algunos espacios en escenarios propicios para la delincuencia.
Juanka es ampliamente conocido por su canal “Vámonos Con Juanka”, donde recorre distintas comunidades cubanas entregando donaciones, promoviendo mensajes de esperanza y mostrando historias de vida invisibilizadas por los medios oficiales. Su estilo cercano, su autenticidad y su compromiso humanitario le han ganado una audiencia fiel dentro y fuera de Cuba.
Este nuevo episodio, aunque doloroso, parece no haber quebrado su determinación. “Las cosas materiales van y vienen. Lo que no me pueden quitar es el deseo de seguir haciendo el bien. Lo seguiré haciendo con o sin teléfono, con o sin dinero”, aseguró con voz entrecortada.
Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre el inicio de una investigación formal ni se han reportado detenciones. El silencio institucional sobre lo ocurrido ha sido objeto de crítica, especialmente en un contexto donde la inseguridad ciudadana se ha vuelto una preocupación creciente para los habaneros.
El caso del youtuber pone en evidencia no solo la vulnerabilidad de los ciudadanos ante la delincuencia, sino también las carencias estructurales del sistema de seguridad pública en zonas clave de la capital. En paralelo, reabre el debate sobre el deterioro de los servicios básicos, como las cámaras de vigilancia y la atención policial, incluso en espacios turísticos supuestamente protegidos.
Mientras tanto, Juanka continúa compartiendo contenido en sus plataformas, reafirmando su compromiso con los más necesitados. “Yo no me rindo. Y mientras haya alguien allá afuera que necesite ayuda, allá estaré”, concluyó en un emotivo mensaje. Este incidente no solo es un llamado de alerta sobre la seguridad en Cuba, sino también un recordatorio del coraje con el que muchos ciudadanos enfrentan la adversidad en nombre del bien común.