¡38 arrestos y aún en libertad! El caso de un delincuente cubano que desata polémica en Florida

Foto: Video de YouTube de CBS 12 News

La Oficina del Sheriff del condado de Martin, en Florida, confirmó la detención de Deibbys Cardoso Rodríguez, un cubano de 31 años, originario de Cienfuegos y en situación migratoria irregular. El hombre, que además vive en condición de calle, terminó arrestado tras robar un Jeep Wrangler en Broward y conducirlo hacia el norte hasta la ciudad de Stuart. Durante la huida, intentó provocar un choque, lo que elevó la alarma sobre su peligrosidad.

Según el sheriff John Budensiek se trata de su arresto número 38 en Estados Unidos, un récord que refleja tanto su historial de reincidencia como las debilidades del sistema para detener el ciclo de delitos. “Este es su arresto número 38. Ya es hora”, en referencia a que el sistema no ha logrado frenar su actividad delictiva.


Un historial criminal extenso

Cardoso acumula desde hace años una larga lista de acusaciones que incluyen robo, tráfico de drogas, violencia, resistirse al arresto, intoxicación desordenada, conducir bajo los efectos del alcohol, exhibicionismo, peleas y hurtos mayores.

De acuerdo con los archivos del centro de detención, Cardoso fue arrestado el 8 de septiembre de 2025. El recluso, de 170 libras de peso y 5 pies con 6 pulgadas de estatura. Esta vez se le imputa por robo mayor de vehículo motorizado y conducir sin licencia válida, ya que esta había sido suspendida o revocada. El juez fijó una fianza total de 3,000 dólares: 2,500 por el hurto del automóvil y 500 por la infracción de tránsito.

Uno de los antecedentes de este cubano se remonta a julio de 2024, cuando lo detuvieron en Miami Beach tras agredir a una empleada de hotel, exhibirle sus genitales y amenazarla con violarla. En esa ocasión, las autoridades también lo catalogaron como una persona sin hogar, con amplio historial delictivo y vinculado al consumo de drogas.

“Decisiones como esta tienen un resultado muy predecible: si tomas la salida equivocada, definitivamente vas por mal camino”, comentó el oficial.


Preguntas sobre migración y deportación

Cardoso se encuentra en estatus ilegal en Estados Unidos, y tras su arresto ya se notificó a las agencias federales de inmigración para estudiar un proceso de deportación. Sin embargo, la gran pregunta es por qué no lo deportaron antes, pese a tener múltiples antecedentes.

Expertos en leyes migratorias explican que los procesos de deportación suelen ser lentos y dependen de la disponibilidad de acuerdos con el país de origen. En el caso cubano, aunque en los últimos años se han retomado las deportaciones, existen limitaciones diplomáticas que retrasan o impiden la expulsión inmediata de individuos con orden final de deportación.

Casos similares en Florida

Este arresto recuerda otros episodios recientes que han generado debate en Miami-Dade y Broward. En 2024, la policía de Hialeah arrestó a otro cubano tras acumular más de 20 arrestos por robos y posesión de drogas, sin ser enfrentar un proceso de deportación. En 2025, otro caso en Fort Lauderdale involucró a un migrante cubano con 15 antecedentes, lo que volvió a encender las críticas sobre la falta de coordinación entre el sistema judicial y el migratorio. La diferencia con Cardoso es la magnitud: 38 arrestos en menos de una década lo convierten en un caso extremo de reincidencia.

Reacción de la comunidad

El caso ha generado preocupación entre residentes de Stuart y del sur de Florida. Algunos vecinos expresaron su temor de que la impunidad y la falta de consecuencias migratorias fomenten la reincidencia delictiva, especialmente entre quienes no tienen residencia legal ni medios de subsistencia.

Por otro lado, activistas proinmigrantes advierten que no se debe generalizar, ya que la mayoría de los migrantes cubanos en Florida trabajan, contribuyen a la economía y no tienen antecedentes criminales. Temen que casos como este se utilicen para estigmatizar a toda una comunidad.

Fallas en el sistema

El caso de Cardoso expone un dilema mayor:

  • Judicialmente, un individuo puede ser detenido y liberado en múltiples ocasiones por delitos menores o al pagar fianza.
  • Migratoriamente, los procesos de deportación dependen de acuerdos diplomáticos y de recursos disponibles, lo que genera vacíos legales que terminan beneficiando a reincidentes.

Analistas señalan que, sin una mejor coordinación entre cortes locales y autoridades federales de inmigración, casos como este seguirán repitiéndose.

Una señal de alerta

La detención número 38 de Deibbys Cardoso Rodríguez no es solo un caso policial más, sino un síntoma de un problema estructural: la incapacidad del sistema para detener a delincuentes reincidentes y al mismo tiempo aplicar las leyes migratorias con eficiencia.

Mientras las autoridades locales insisten en que ya “es hora” de actuar, la comunidad sigue dividida entre la necesidad de seguridad pública y la defensa de derechos humanos en un contexto migratorio cada vez más complejo.


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