El criminal régimen cubano tiene detenido a un niño de 14 años que se manifestó pacíficamente el pasado 11 de julio, junto a cientos de isleños que tomaron las calles para reclamar su derecho a ser libres tras más de seis décadas de dictadura.
Christopher Lleonart Santana, tiene un ligero retraso mental y está recluido en un centro de formación integral (El Combinadito) para menores de edad.
Según la activista Lara Crofs, que tomó el testimonio de la madre de Lleonart Santana, y lo publicó en Facebook, el adolescente fue detenido el pasado 17 de julio en su propia casa, y ahora lo acusan de vandalismo.
Naika Rosa Santana Leiva, madre del niño, dice que cuando la llama llora mucho, y denuncia lo golpean y no le dan sus medicamentos.
«Anteriormente a su encarcelamiento Christopher había atentado contra su vida en dos ocasiones. Su madre claro está, vive en un continuo desespero», concluyó Crofs.
Cada día salen a la luz lamentables historias como estas, se desconoce el número de menores que hay en las cárceles cubanas, que por haber participado en el 11J de manera directa o indirecta, permanecen en prisión injustamente.
Mientras tanto somos muchos los que esperamos un pronunciamiento o una condena a los hechos por parte del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia o Unicef, que tiene presencia en la Isla.
La Unicef debe proveer ayuda humanitaria y desarrollo a niños y madres en países tercermundistas, ese es supuestamente su rol.
Cuba en Miami revisó detalladamente las redes sociales de la Unicef en Cuba, y no aparece una sola publicación que denuncie el desespero de los padres que tienen a hijos menores de edad encarcelados injustamente por un régimen opresor. ¿Hasta cuándo la complicidad de estas organizaciones?
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