La joven cubana que se identifica como Katy BeLa en su canal de Youtube denunció este lunes en un video cómo fue víctima de una traumática experiencia a manos de un trabajador de un hotel en Varadero en un viaje familiar que hizo en el verano a ese destino playero.
Los hechos ocurrieron en el hotel Ocean Vista Azul en septiembre. Katy dijo durante la grabación que la experiencia fue muy traumática y que al inicio pensaba que era algo que había sonado, pero que a raíz de la reciente denuncia de la turista canadiense se llenó de valor para compartir su experiencia y poner en alerta a otras chicas que visitan estos hoteles.
La joven cubana relata que se encontraba durmiendo en su habitación con su novio cuando en dos ocasiones durante la noche tocaron a la puerta. En ninguna de las ocasiones había alguien a la puerta cuando ellos iban a revisar, pero pasadas las horas y ya estando ambos profundamente dormidos una manos que la «manoseaban» la despertaron.
Katy dijo que su novio estaba durmiendo a su lado y que había un hombre a sus pies mirándola con ojos muy rojos.
Sin querer alarmar a su novio e intentando aún comprender que sucedía, Katy mantuvo la calma. Minutos después cuando el hombre se había marchado, y ante la insistencia de ella de que un hombre había estado en la habitación revisaron el cuarto y confirmaron que una ventana estaba abierta y la cortina corrida a un lado.
Katy dijo que la policía les dijo que no podían entrar al hotel, porque no querían llamar la atención ante los turistas; solo podían enviar oficiales vestidos de civil para preservar la imagen del lugar.
Además contó que le mintieron al decirle que ya habían atrapado al hombre y que este había confesado cuando ella después comprobó que se trataba del piscinero del hotel y quien aún estaba en libertad.
En su video la youtuber cubana relata los pormenores del caso hasta el momento de la detención del culpable y anécdotas vividas durante el juicio.
El hombre que conservaba imágenes tomadas de la joven por debajo de la sabana se presentó al juicio «como si nada». «El hombre casi que me saluda, el hombre casi que me da un beso en la cara», recuerda Katy con horror.
Durante el juicio, al que no se le permitió un abogado y solo fue representada por una fiscal, Katy recuerda la desagradable experiencia y lo humillada que se sintió.
La condena a este ciudadano fue de un año de reclusión en una granja con trabajo correccional.
«En cuanto tenga buena conducta ese desgraciado va a salir y va a volver a hacer lo mismo», asegura la joven.
En su grabación Katy compartió imágenes de las pruebas de las denuncias y documentos auténticos sobre el caso. También dijo que el gerente del hotel hizo que su novio, quien es residente en el extranjero, firmara un documento donde se le prohíbe hablar del caso con la prensa.
11 Comentarios