El desabastecimiento de productos alimenticios, la escasez de medicamentos, entre otros muchos factores, como la reducción del número de ejemplares en las tiradas de los periódicos en la Isla, han encendido las alarmas de los cubanos atemorizados ante lo que apunta a ser un nuevo período especial, no obstante algunos entrevistados en un reciente reportaje de CubaNet, no parecen tan asombrados y aseguran que la crisis de la década de los ’90 nunca terminó.
La mayoría no estaba al tanto de la reducción de la cantidad de ejemplares de los diarios estatales, sin embargo todos se mostraron preocupados ante las altas probabilidades de que la escasez continúe.
¿Acaso salimos del período especial?, fue la pregunta de un cubano a la periodista que lo interrogó.
«Es que no tengo la sensación de que hayamos salido del período especial, que llegó hasta el año 1996, tengo la sensación de que seguimos en un período especial, en sentido general te diría que la crisis que se percibe…es que la gente tiene su descontento y cuando hay descontento es que las cosas no están funcionando como deberían de funcionar», añadió uno de los primeros entrevistados.
«No sé si tanto como un período especial, pero bueno están escaseando bastante las cosas, ahora mismo la sal estaba perdida, en ningún lado ni en las tiendas, ni en bodegas ni nada, aparece la sal, se pierde el puré de tomate, pero bueno siempre aparecen, no sé si llegaremos allá», comentó una mujer.
«En los ’90 había escasez…muchas veces tenías el dinero y no habían las cosas, y ahora a veces tienes el dinero y tampoco tienes las cosas, pero cuando pasan unos días a veces las encuentras», expresó una entrevistada.
«Hay muchos viejitos y personas» en general «que dependen del salario, tú cobras hoy y ya, porque cuando vas al agro al momento se te va» el dinero, agregó.
Algunos se quejaron del acaparamiento, mientras otros sugirieron deberían de tomarse medidas más profundas y radicales.
Pese a los momentos de alivio, Cuba ha vivido en una perenne crisis económica desde la llegada de Fidel Castro al poder en 1959, no obstante el país parece estar abocado a otra depresión económica, con una Venezuela inestable, en medio también de una escalada de las tensiones con EEUU, y la posible entrada en vigor total del Título III de la Ley Helms-Burton, lo que ahuyentaría a las empresas extranjeras que invierten en la Isla.
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