Desde el pasado 10 de enero está activo en Cuba el cable de fibra óptica que viene desde Venezuela y que se llama ALBA-1 pero los cubanos no se han beneficiado en nada. Un reporte del diario español «El Confidencial» revela que el cable está siendo solo utilizado por las altas esferas del gobierno de la isla negando así el acceso a la población en la isla.
«Desde el pasado 10 de enero el cable está oficialmente operativo, pero la vida sigue igual. Sólo las élites del régimen tienen acceso a la conexión de alta velocidad.» dice el diario en su reportaje. “No se ha notado absolutamente nada. Teóricamente, está operativa, pero no a efectos prácticos. Aquí no se suelen dar razones. Nosotros, en la oficina, seguimos conectándonos vía satélite, ahora mismo con una velocidad de subida de 128 kb/s y de bajada de 64 kb/s” dijo a «El Confidencial» un reportero de RTVE en Cuba.
Esta claro que el gobierno de Cuba no pondrá Internet a los cubanos pero tampoco mejorara la conexión de sus empresas ni organismos porque no le conviene. El gobierno de Cuba tiene pánico al libre flujo de información e Internet es la herramienta perfecta para que eso suceda.
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