El candidato republicano a la presidencia, Donald Trump, prometió el miércoles a los hispanos «una vida mucho mejor». Evidentemente todo forma parte de sus esfuerzos recientes para suavizar su tono y ampliar su base de apoyo, cuando faltan 11 semanas para la elección presidencial.
De campaña en Florida, un estado en disputa donde una derrota sería fatal para él, el candidato republicano reiteró su promesa de construir un muro en la frontera con México para impedir el paso de inmigrantes, poniendo de manifiesto los malabarismos que debe realizar para conservar el voto de la derecha y a la vez ganar el de los moderados.
«Pelearé para darle a cada ciudadano hispano un futuro mucho mejor, una vida mucho mejor». «Tienes derecho a caminar por la calle sin que te disparen. Tienes derecho a que tu hijo reciba una buena educación. Tienes derecho a ser el dueño de tu casa. Tienes derecho a un buen empleo», dijo Trump en un mitin en Tampa, estado en el que, según las encuestas, se encuentra en desventaja.
La exhortación de Trump a los hispanos fue en gran medida un eco de su llamado reciente a los afroestadounidenses. Pocas veces intentó atraer a las minorías durante su insólita conquista de la candidatura republicana en meses anteriores.
Ahora, ante un electorado más amplio, Trump insinuó que los demócratas se han aprovechado de los hispanos. Dijo que los 600.000 negocios de propiedad de latinos en Florida se beneficiarán con su plan económico, pero no entró en detalles concretos.
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