Una mujer canadiense que viajo a Cuba junto a su hijo de vacaciones vivió una pesadilla en la isla luego de que las autoridades retuvieron a la familia en la isla hasta que el seguro médico pagó la operación de apendicitis a que fue sometido su niño de 7 años.
La madre lamento profundamente haber viajado de vacaciones a la isla y según ella que los médicos cubanos le hayan extraído incorrectamente el apéndice a su hijo.
Nicole Antinello, residente en Caledonia, Ontario, viajó a la isla junto a su hijo Cole, su hermana de 16 años y la abuela de los muchachos, de 76, y muy pronto todos sintieron síntomas parecidos a la gripe, que afectaron más al niño.
Nicole calificó de «repugnante» las condiciones del hospital pediátrico en Holguín. Eran «como una zona de guerra», con agua corriendo por las paredes, los inodoros funcionando sin parar y polvo por todas partes, debido a una zona de construcción en las inmediaciones de la instalación médica.
El niño fue dado de alta y trasladado a un hotel cercano, donde “ha vuelto a enfermar”, indicó su madre, a quien las autoridades cubanas no le permitían abandonar la isla hasta que la aseguradora Manulife pagara la cuenta médica. Algo que finalmente ocurrió y la familia Antinello espera regresar a Canadá este viernes, 28 de julio.
«No puedo esperar a regresar a Canadá, estoy nerviosa porque Cole ha tenido síntomas similares a los de la gripe, espero que todos desaparezcan antes de despegar», agregó Nicole al diario CBC.
«No he dormido en días, es tan aterrador, y mi cabeza gira, y solo quiero regresar a Canadá», afirma Nicole Antinello en el reportaje.
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