Invención de joven cubano sorprende al Instituto Tecnológico de Massachusetts

En las aulas del Instituto Tecnológico de Massachusetts estudió el famoso matemático y creador de la cibernética, Norbet Wiener y también obtuvo su formación en negocios el exsecretario general de la ONU, Kofi Annan.


¿Quién lo diría? ¡La ciencia cubana está de fiesta! Esta prestigiosa escuela de ingeniería avalada como la mejor de Estados Unidos y el Mundo por US.News&World Report incluyó en su revista al cubano Alexander López Savran y a otros 35 jóvenes de Latinoamérica que por sus innovaciones, según ellos “están a punto de cambiar el mundo con tecnología”.

Él, graduado de Ingeniería Eléctrica en la Universidad Central de Las Villas es el único cubano que integró la lista de innovadores latinoamericanos. A sus 31 años ya es dueño, desde noviembre pasado, del premio que le otorgó el Instituto Tecnológico de Massachusetts por haber sido el creador de un nuevo tipo de biodigestor basado en el modelo de cúpula fija.

Su proyecto fue elogiado también porque tuvo niveles de eficiencia probada para distribuir gas, sin generar gasto alguno de energía. Pero además, el colegio estadounidense resaltó que el logro de López Savran era igualmente destacable por el enfoque social de su invento.

El invento de este espirituano han beneficiado a 500 personas en cuatro comunidades en el poblado de Cabaiguán, quienes lograron ahorrar casi el 50 % de lo que gastaban usando las fuentes tradicionales de energía. Por eso, el Instituto estadounidense resaltó que su innovación es “una de las soluciones tecnológicas que mejoran e incluso salvan la vida de la gente”.

La planta de Biogás de Alexander está en funcionamiento y cuenta con biodigestores que reciclan los residuos de un centro porcino y lo transforman en biogás. Eso, según el propio creador, ayuda a disminuir con notables efectos, el consumo de portadores energéticos convencionales, con un ahorro de más de 122 megavatio-hora al año. Además impide las emisiones de gases de efecto invernadero para ayudar a proteger el medio ambiente.


Orgullo de nuestra Cuba, este joven, miembro de la Red Latinoamericana de Biogás, sabe también que es el creador de una innovación de incalculable impacto social y ambiental. Su nueva planta de biodigestores aumenta la calidad de vida de muchas personas que viven en esas comunidades cubanas, ayuda a crear nuevos empleos, e impulsa una alternativa diferente para obtener energía sin necesidad de talar los bosques.

“Hice cambios estructurales y constructivos que permiten ahorrar material y consiguen más resistencia, además se crea un nuevo servicio en esas comunidades de Cabaiguán, municipio con amplio trabajo en el uso de biogás”, confesó en entrevista el orgulloso el científico espirituano.

Cabaiguán sigue siendo como muchos la califican, la capital del Biogás en la Isla y en ella un cubano se distingue por innovar con energías bionaturales. Quizás, hoy no comprendamos a ciencia cierta la utilidad de la innovación de Alexander, pero no podemos olvidar que el petróleo no es infinito y cada vez los seres humanos nos estamos volviendo más dependiente de los hidrocarburnos para obtener energía eléctrica.

Nada despreciable las ideas de Alexander y por eso está entre los latinos innovadores más destacados de este 2018.


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