El lujoso hotel Manzana Kempinski parece un museo ante la baja del turismo, y los exorbitantes precios

Empleados del suntuoso hotel Manzana Kempinski emplazado en el centro histórico de La Habana Vieja, dieron a conocer al diario independiente 14ymedio, que debido al frenazo en la llegada del turismo que experimenta la Mayor de las Antillas, y los elevados precios del coloso, el mismo se encuentra debajo del 20% de ocupación.


El Manzana Kempinski se inauguró en marzo de 2017, con 246 habitaciones, de ellas 172 estándar, y ahora parece estar lejos de las proyecciones que para él se tenían en un inicio.

Una habitación Patio, la más estándar de todo el hotel, cuesta unos 440 dólares sin desayuno, mientras que la más exclusiva, la suite esquina alcanza los 1.355 dólares la noche.

Xavier Destribats, gerente general afirmó hace algunas semanas que el grupo hotelero suizo tiene diversos proyectos más en conjunto con la estatal Gaviota.

“Hemos apostado por Cuba y vamos a seguir creciendo con Gaviota con un segundo hotel y quizás un tercero”, puntualizó.

Según el directivo, tienen clientes de Francia, Alemania, Australia, Reino Unido, Rusia y China, no obstante no arrojó ningún dato de ocupación y los trabajadores consideran insuficientes los que manejan.


“Esto parece un museo, de esos muy bonitos pero casi vacíos”, dijo una camarera que pidió hablar bajo anonimato.

“Estamos temiendo que haya recortes de personal y que nos manden para la casa, como ha pasado con otros hoteles. La última semana nos salvó que se hospedaron varios clientes que venían a un evento, pero ya están a punto de irse”, mencionó otra empleada, que cobra poco más de 300 CUP, moneda nacional, lo que se traduce en menos de 15 dólares mensuales.

El bartender del hotel contó: “la mayoría de los clientes que llegan hasta el bar vienen para admirar la vista de la ciudad y por la piscina estilo ‘infinito’ que atrae a muchos para refrescar. Hay mucha paz aquí arriba y como estamos abiertos hasta la medianoche se convierte en un lugar de paso después que los turistas salen de los conciertos o de las actividades culturales en la zona”.

“Viene mucha gente a mirar y a curiosear porque el proceso de restauración fue muy cuidadoso y el hotel tiene espacios en los que dan ganas de quedarse, pero de ahí a meter la mano en el bolsillo y alquilar una habitación va un trecho”, detalló la camarera entrevistada.

“Si vienen pocos huéspedes pierde todo sentido seguir aquí, porque lo más importante para nosotros es la propina que los trabajadores comparten al final del día, pero en las últimas semanas es muy pobre”, añadió.

Katy Ramos, gestora de paquetes turísticos confirma que “por el momento esta es una inversión que parece de largo aliento, porque el hotel tiene poca demanda debido a sus precios”.

“Siempre hay alguien dispuesto a pagar caro el buen servicio, pero lo que está pasando no tiene nada que ver con el hotel sino con todo el país. Hay una caída en el número de turistas que tiene muy preocupados a todos los que vivimos de este negocio”, señaló Ramos.

EE UU publicó una lista de más de 100 empresas, entre las que se incluían restaurantes y dos destilerías de ron, que los viajeros de ese país no pueden visitar.

14ymedio subraya que agencias de turismo, y al menos 84 hoteles en toda Cuba aparecen en esa relación, el Manzana Kempinski es uno de ellos.

El hotel está gestionado por la compañía alemana Kempinski, con sede en Suiza, pero el inmueble es propiedad de la corporación militar GAESA, para quien directamente están diseñadas las medidas de la administración de Donald Trump.

La segunda fuente de ingresos detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, es el sector turístico, que contribuye con un 10% del producto interno bruto (PIB).

También genera medio millón de empleos en el país, y un importante rubro para los cuentapropistas, hasta el 31 de mayo, la Isla había registrado la visita de más de 2.1 millones turistas extranjeros, el 93% de los que habían llegado hasta la misma fecha el pasado año.

Pero según Ramos, en la cifra “se cuenta a los cubanoamericanos que vienen a visitar a sus familias y también a personas que vienen a eventos y congresos, pero no a hacer turismo”.

Y por otra parte, el régimen mantiene proyecciones de recibir a cinco millones de turistas este año.

(Con información de 14ymedio)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *