Cuba considera asignar a la Salud y la Asistencia Social el 28% del presupuesto

Entre las aspiraciones del gobierno cubano para este 2017 está recaudar un total de 4,532 millones de pesos cubanos (188 millones de dólares aproximandamente) a partir de impuestos que serán deducidos al sector privado. Esto significaría un 7% de los 63,811 millones de pesos cubanos que han sido proyectados como gastos para el presupuesto total del presente año.
Según el órgano de prensa oficial de la Isla; Granma, hasta la fecha continúan siendo las empresas del sector estatal las principales fuentes recaudadoras con un 91% del ingreso.

Bajo el mandado de Raúl Castro, en 2010 fueron ampliadas las profesiones en las que los ciudadanos pueden desarrollar el trabajo cuentapropista. Otro paso importante fue el consentimiento en 2012 para la formación de cooperativas no agropecuarias, que hasta el momento han sido una inyección importante de ingresos al país, convirtiéndose en un sector revolucionador de la economía cubana que ofrece empleo a alrededor de un 25% de la población cubana en edad laboral.


El 57% del presupuesto fijado anualmente es dedicado a gastos sociales, lo que equivale a unos 36,554 millones de pesos. Esos gastos sociales a su vez se destinan a dos partidas presupuestarias principales: La salud pública y la asistencia social, mientras que a la educación se destina el 23% de los mismos. Este presupuesto se destina a mantener las “conquistas sociales de la revolución”, hospitales públicos, consultorios médicos, policlínicos, hogares de ancianos, casas de abuelos y hogares para impedidos físicos. Además de abastecer en el sector educacional a 9,433 escuelas, ha destacado el director general de Ejecución del Ministerio de Finanzas y Precios, Jesús Matos.

Hasta el momento el presupuesto que ha sido fijado para el presente año 2017 refleja un déficit fiscal de 477 millones de dólares y aunque se reconoce que los ingresos han aumentado en un 3% con respecto a los ingresos del año anterior, los gastos proyectados para este 2017 también se han incrementado en un 11% con respecto al 2016.
Al respecto Jesús Matos destacó: “En esta planificación incide el respaldo presupuestario otorgado al incremento previsto de la producción nacional, fundamentalmente de alimentos, que sustituyen importaciones o fomentan exportaciones, lo que genera ahorros de divisas”.


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