Una caravana con cientos de centroamericanos que planean buscar asilo en Estados Unidos ha llegado a la frontera poniendo en alerta a las autoridades fronterizas.
Entre los migrantes, viajan con niños, mujeres y personas mayores que buscan la libertad en Estados Unidos.
Todos salieron del albergue donde se estaban quedando, en el centro de Tijuana, en cinco autobuses escolares. Los policías le abrieron camino la caravana por las calles hasta una playa de Tijuana. Simpatizantes de los inmigrantes se reunieron en apoyo en ambos lados de la frontera.
El gobierno de Estados Unidos no esta muy contento con la llegada de la caravana «es un intento deliberado de socavar nuestras leyes y sobrecargar nuestro sistema” dijo el secretario de Justicia Jeff Sessions quien prometió, de ser necesario, enviar más jueces de inmigración a la frontera para que resuelvan casos.
La llegada de la caravana a la garita de control en San Ysidro, en San Diego, el cruce fronterizo más transitado del mundo, marcó el fin de una travesía de un mes en la que los migrantes avanzaron a pie, en trenes de carga y en los autobuses. Muchos de ellos dicen que dejaron su tierra natal porque tenían miedo por su seguridad.
